Perdió los nervios al creer que su suegra era víctima de una estafa y destrozó con una maza el coche de la presunta timadora

La Voz OURENSE

VIANA DO BOLO

MIGUEL VILLAR

La venta de una máquina de purificación de agua provocó un incidente en Viana do Bolo que este martes llegó a juicio en Ourense

28 abr 2021 . Actualizado a las 16:47 h.

No era la primera vez que alguien intentaba estafar a su suegra y, en la creencia de que la historia se estaba repitiendo, siguió en su coche a la presunta timadora cuando regresaba del banco con la octogenaria y acabó destrozándole el vehículo con una maza.

Resultó que la anciana no había sido engañada. La comercial de una empresa le había vendido, e instalado, una máquina de purificación de agua en su vivienda y tras cerrar ambas el acuerdo, la vendedora se ofreció a ir con la clienta al banco para sacar los dos mil euros que costaba el aparato. Cuando se presentaron en la oficina, el director de la sucursal, situada en Viana do Bolo, llamó a la hija de su clienta para alertarle de la situación, alertando ella a la Guardia Civil y contándole lo que estaba pasando, y sus temores, a su marido. El asunto se desmadró. Plácido O. G. cogió el coche y una maza y se fue en busca de la presunta estafadora, con la que se cruzó cuando ambas mujeres volvían al domicilio de la compradora. Al llegar, el acusado se bajó del coche y se acercó a la comercial, exigiéndole que le entregara el contrato. Ella se sintió intimidada y no se lo dio, por lo que el hombre empezó a golpear el coche con la maza, provocando importantes desperfectos y un ataque de ansiedad en la víctima, quien lo denunció al juzgado. Su propia suegra estaba dentro del automóvil en ese momento, si bien no sufrió daño alguno. 

Fruto de aquel incidente se iniciaron diligencias judiciales contra el responsable de los daños en el coche, que este martes acudió a un juicio en la capital ourensana. Reconoció que aquel día perdió los nervios, aceptando una condena por un delito de daños. Se acordó que pague una multa de 540 euros y abone los daños en el coche, de casi mil euros.