El sindicato emisor niega que la postura del Juzgado de Ourense suponga un carpetazo sobre el asunto, a falta del juicio
23 ene 2020 . Actualizado a las 05:00 h.El Juzgado Contencioso-Administrativo número uno de Ourense denegó este miércoles a la CIG su solicitud de suspensión cautelar de la orden de supresión de los servicios del paritorio del hospital comarcal de Verín -que la Xunta prevé reabrir durante el mes de febrero-, emitida el pasado 29 de noviembre por el gerente del área sanitaria provincial, Félix Rubial. «Nos encontramos ante dos bienes jurídicos dignos de protección», indica la jueza en el auto. La CIG entiende que la Xunta realiza «una ponderación equivocada a la hora de valorar los riesgos para la salud de las mujeres embarazadas al anteponer el peligro derivado de la pérdida de destreza de los profesionales frente al peligro derivado de la distancia para atención en un centro hospitalario».
Con todo, la magistrada subraya que «el órgano judicial no puede sustituir en una pieza de medidas cautelares una decisión de la Administración sanitaria por su propio criterio o del recurrente, salvo que se aprecie riesgo inminente para derechos constitucionales dignos de protección».
El responsable comarcal de la CIG, Anxo García Torres, dio su versión sobre la notificación judicial, señalando que esto no significa un carpetazo de la justicia sobre el asunto: «O xulgado de Ourense non entra no fondo desta cuestión, que se verá posteriormente no xuízo. Tan solo se descarta a solicitude de suspensión cautelar que fixo o sindicato trala clausura. O auto xudicial, de feito, recoñece en certa medida parte dos nosos argumentos, como é cuestionar o suposto baixo número de partos na comarca para xustificar o peche do paridoiro».