La siniestralidad en las empresas de la provincia sigue subiendo en 2018

Marta Vázquez Fernández
Marta Vázquez OURENSE / LA VOZ

VERÍN

Santi M. Amil

Los sindicatos lo atribuyen a la temporalidad y a la precariedad del mercado laboral

22 sep 2018 . Actualizado a las 19:39 h.

La situación económica mejora en la provincia pero a su paso deja algunas sombras. El crecimiento del empleo, al abrigo de las perspectivas más favorables que tienen algunas empresas, está provocando que el paro haya descendido ya casi a los niveles anteriores a los de la crisis económica, pero la situación en la que se encuentran hoy miles de trabajadores no es, ni de lejos, la que había en 2008.

Así, en los últimos dos años los datos sobre siniestralidad laboral están repuntando de forma alarmante, y tras cerrar un 2017 con un incremento de casi un 10?%, este año los incidentes que se producen en los entornos laborales, y que provocan una baja para el trabajador, siguen al alza. Así lo evidencian los datos tanto del Ministerio de Empleo como del Instituto de seguridade e saúde laboral de Galicia, Issga. Según esos informes, en el primer semestre del año los accidentes han subido un 6,3 %, con 1.483 percances, frente a los 1.396 registrados en el mismo período del año anterior. «La precariedad que se ha instalado en nuestro mercado laboral tiene mucho que ver con lo que está pasando», asegura Mario Franco, secretario provincial de UGT, que recuerda además que la prevención laboral supone un coste que muchas empresas, sobre todo las de menor tamaño, no parecen estar dispuestas a afrontar. «En la provincia hay muchas pymes en las que no existe la figura del delegado de prevención y eso es importante a la hora de afrontar este asunto, porque cuando existe este papel siempre hay más garantías de que se cumpla la normativa y se vele porque los empleados estén en entornos seguros».

Explica que, por este motivo, desde el sindicato están apostando por la creación de un delegado que, a nivel provincial, cubra ese vacío en las empresas.

Temor a denunciar

Con todo, advierte de que «hay que incrementar el dinero que se destina a la prevención», y recuerda que la temporalidad que se ha instalado en el mercado laboral tiene una incidencia directa en el repunte de accidentes. «Un trabajador con un contrato temporal no tiene la formación en prevención que tiene uno indefinido y en muchos casos tampoco la seguridad para quejarse si no se cumplen las normativas de prevención. Hemos recibido quejas de operarios que no saben cómo plantear este tipo de cosas a sus empleadores porque tienen temor a perder sus empleos», afirma Franco.

La cara menos dura de esta situación es la que tiene que ver con el resultado de los accidentes. Este año se ha registrado una víctima mortal en las empresas de la provincia, y esto supone un descenso importante, ya que hasta junio del año pasado las víctimas ya habían sido cinco.

Crecen, por contra, los que se saldan con heridas graves para el empleado implicado, que han pasado de 20 a 24, si bien la mayoría de las incidencias registradas en horario laboral se cierran con resultados leves, de acuerdo con los datos oficiales.

Crecen los «in itínere»

Un apartado en el que sí se están registrando este año números alarmantes es en el de los siniestros que tiene lugar en desplazamientos, esos que se denominan in itínere. Este año, solo entre los meses de enero y junio, han sido ya 132 los que se han registrado en la provincia de Ourense, lo que representa un incremento del 65 % respecto al año anterior, situándose además como el peor dato de toda la comunidad gallega. Para los sindicatos, esto es una consecuencia directa, y de nuevo, de la precariedad laboral. «Los trabajadores tienen varios contratos y eso supone que deben hacer más desplazamientos, lo que multiplica el riesgo de que sufran un accidente. Y eso está pasando», asegura el responsable provincial de UGT, que tampoco descarta la relación entre este repunte y el incremento de las jornadas laborales. «La precariedad a la que hemos descendido en estos diez años de crisis es lo que nos ha llevado a esta situación, esta es la parte de la recuperación de la que no se habla. Tenemos que recuperar la calidad del trabajo de hace diez años, si no mal vamos», advierte.

Y al observar los datos parece que hay motivos sobrados para tomar medidas ya que la siniestralidad laboral de la provincia es mayor que la de otras provincias gallegas. En Lugo ha habido en el primer semestre del año 1.465 accidentes laborales. Ello a pesar de que en este territorio hay 20.000 afiliados más a la Seguridad Social que en Ourense.

Las empresas de la industria manufacturera son las que más accidentes registran

No tienen el mismo riesgo de ser víctimas de un accidente laboral quienes desempeñan un trabajo en una industria que los que lo hacen, por ejemplo, en una oficina. Es algo que parece evidente y que además se refleja claramente en las estadísticas oficiales. La que publica mensualmente el Ministerio de Empleo desgrana los sectores con detalle y especifica que, en el caso de Ourense, el que más riesgo presenta es el de la industria manufacturera. En empresas que desarrollan esa actividad se han contabilizado en los primeros seis meses del año 534 accidentes laborales, colocándose en el primer puesto en cuanto a peligrosidad. Le siguen las empresas del sector de la construcción, donde ha habido 248 accidentes.

Eso sí, a pesar de lo que pueda parecer los centros de trabajo en los que se desarrollan actividades sanitarias y de servicios sociales no siempre son el entorno más seguro para los asalariados y prueba de ello es que en este sector ha habido ya 211 incidentes. El comercio, muy de cerca, ha contabilizado otros 200.

En el otro extremo de la tabla se encuentran oficios como el de la información o la comunicación, con tres incidentes entre enero y junio, o el de las actividades financieras o de seguros, con cuatro.

Las obras del AVE, al juzgado

Y aunque los accidentes laborales no siempre llegan a judicializarse, en los casos más graves sí que ocurre. En Verín el juzgado de instrucción 1 ha abierto diligencias por la posible existencia de un delito contra los derechos de los trabajadores en varios accidentes registrados en las obras del AVE. Se investigan ocho siniestros en los que perdieron la vida cuatro trabajadores, resultando otros heridos. La denuncia la interpuso la CIG.