La dirección prevé terminar el traslado en noviembre
10 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Veintiún pacientes ocupan desde ayer el nuevo edificio de hospitalización del CHUO. Dieciséis de ellos ya ocupaban habitaciones en la unidad de Medicina Interna del primer piso del edificio Cristal y otros cinco estaban en observación o llegaron en las horas previas a Urgencias y fueron ingresados ya directamente en esa instalación. Con su llegada a las habitaciones de la sexta planta la nueva infraestructura sanitaria, en la que se invirtieron 41 millones de euros y que recibió el pasado viernes la licencia municipal de ocupación, ya está operativa.
El traslado comenzó a las tres de la tarde e implicó a auxiliares, enfermeros, celadores, facultativos, y a personal del resto de servicios necesarios para poner el edificio en funcionamiento, desde farmacia a lencería o cocina.
El cambio proseguirá durante todo este mes y en los primeros días de noviembre, siguiendo el esquema elaborado por el comité multidisciplinar encargado de diseñar el plan de traslados. «Esperamos que entre la primera y la segunda semana del próximo mes debiéramos tener ocupado todo el hospital», señalaba ayer Dionisio López Bellido, el gerente del área de gestión integrada de Ourense, Valdeorras y Verín.
El gerente recordó que la elección de la unidad que tenía que comenzar el cambio y su ubicación en el nuevo edificio «tiene que ver con que queríamos empezar por el sitio más alejado de la unidad más alejada; es decir empezar en el escenario que planteaba las peores condiciones para cotejar que todo está perfectamente; porque los que hemos hecho alguna mudanza alguna vez sabemos que justo los pantalones que me quiero poner mañana casi nunca están en el mismo cajón». Con ese símil doméstico explicó López Bellido la necesidad del trabajo de seguimiento que desde ayer están haciendo también los responsables del comité de traslado, que testarán cada uno de los procesos para comprobar que todo se desarrolla según lo previsto y que se puede seguir avanzando en el cambio del resto de unidades según está programado.
La misma entrada principal
De momento, y en tanto no se culmine el traslado -o al menos no esté la mayor parte del proceso de cambio realizado-, no se abrirá la puerta exterior de acceso al público, que tendrá que seguir accediendo para visitar a los pacientes ya ingresados en el nuevo edificio a través de la actual entrada principal del complejo. «Hay que hacer las cosas con criterio y con seguridad», matizaba López Bellido.
Sobre cómo afectará la puesta en marcha del nuevo edificio al funcionamiento interno del complejo, Bellido recordó que es necesario lograr un nivel de convivencia entre la nueva estructura y las antiguas. «El nuevo edificio de hospitalización es solo eso; el resto del CHUO también existe y lo importante es hacer una gestión integral de todo», señalaba. El responsable del área sanitaria mostró su deseo de que se pueda iniciar «lo más pronto posible la nueva obra para tener en todo el CHUO una hospitalización similar; en condiciones dignas y suficientes para nuestros pacientes» y recordó algunos cambios que provocará la liberación de espacios, entre ellos la desaparición de las habitaciones triples o la concentración de consultas externas en el Nai.