Salvo en zonas llanas como Xinzo o Verín, en el resto de la provincia y en la capital su uso está poco extendido
11 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.La utilización de la bicicleta, como medio de transporte para los desplazamientos urbanos, sigue siendo minoritaria en la capital y en la provincia, salvo en villas llanas como Xinzo o Verín. Aunque los planes de movilidad y los ejemplos de otras ciudades europeas y españolas animan a pensar que la expansión de la bicicleta como medio de transporte cotidiano es el futuro, en Ourense su uso es poco popular. No obstante, hay ciclistas que sí la utilizan habitualmente para todo, superando los obstáculos del tráfico, de la lluvia o de las cuestas.
El Concello de Ourense tiene un servicio de préstamo cuyos datos confirman que su utilización se está extendiendo, con más de seis mil préstamos en el año 2011 y superando los cinco mil en los siguientes ejercicios. Este año, hasta el 5 de mayo, eran 596 las utilizaciones de este servicio, donde aprecian la influencia de la climatología. Si llueve, se usa menos. En primavera y verano es cuando más préstamos hay.
En cambio, en O Barco y A Rúa -donde también disponen de bicicletas para prestar, aquí gratuitamente- su uso sigue siendo residual. Los ayuntamientos lo pusieron en marcha con una subvención, pero tuvo poca aceptación. En O Barco, decidieron hacer una nueva campaña para promocionarlas después de mejorar el mantenimiento de las máquinas. Usuarios particulares hay pocos en Valdeorras, aunque algunos conocidos sí lo practican.
En las comarcas de A Limia y Verín el desplazamiento en bicicleta desde aldeas cercanas hasta la capitalidad y dentro de las propias villas es habitual. La bicicleta es usada por docenas de personas, la mayoría de edad avanzada, para cubrir trayectos de dos o tres kilómetros para hacer gestiones o para ir al pueblo. En Verín, el incremento de esta práctica llevará al Concello a habilitar un carril bici en dos zonas: la avenida de Laza y la carretera a Portugal. En los pueblos hay muchas personas, sobre todo jubilados, que no tienen turismo ni carné y este es otro motivo de su uso particular, ya que no hay ningún servicio ni municipal ni privado de alquiler. En Xinzo, en verano hay un día de la bicicleta con un recorrido simbólico.
En la capital, Masa Crítica realizan salidas los últimos jueves del mes para fomentar su uso. «Cada vez veo más bicis, pero aún falta educación y respeto. Nuestra propuesta es pacificar el tráfico -eliminando dobles filas, reduciendo velocidad, con más transporte público- para invitar a la gente a sacarla», opina Rebeca Babarro, de este colectivo. Sin embargo, empresas de mensajería que tenían como alternativa la bicicleta desistieron. «Cuando podemos, salimos a hacer recados en bici, pero la lluvia, las cuestas, el que la ciudad no está preparada ni haya mentalidad lo hacen poco práctico», explica Marisa Arias, responsable de OrenServi. A pesar de que este medio de transporte ecológico incluso puede tener una bonificación fiscal para las empresas que las incluyen en planes de movilidad para sus trabajadores, dicen en la DGT.