Una empresa familiar de productos cárnicos se traslada a Toén para ampliar su producción

La Voz OURENSE / LA VOZ

TOÉN

cedida

La empresa familiar Finosa se instaló en Moreiras

23 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

El concello de Toén está de enhorabuena. La empresa familiar Finosa, que se dedica a la elaboración de productos cárnicos de calidad, como hamburguesas o pinchos morunos, ha decidido ubicar sus instalaciones en el municipio, concretamente en el lugar de Moreiras. De la mano del Grupo De Desenvolvemento Rural Adercou, Finosa pudo recibir una subvención para montar y renovar la maquinaria, trasladándose desde la capital a Toén. «Encontraron en Moreiras o sitio ideal por su ubicación», explica el alcalde, Ricardo González, que señala que es una muy buena noticia para el municipio. Él mismo se desplazó hasta las instalaciones, acompañado del presidente de Adercou y alcalde de A Peroxa, Manuel Seoane, para comprobar un situ el trabajo que realizan los hermanos Delfín y Preciosa González . «La calidad de la empresa ha hecho que crezcan. Ellos abastecen, sobre todo, al sector de la hostelería, y se meten ahora en el reclamo de la distribución en supermercados», explica el regidor. Para llevar a cabo esta expansión necesitaron comprar máquinas para la elaboración de los productos y ampliar las instalaciones para tener un almacén disponible. Y lo hicieron gracias a una inversión de 40.800 euros y a estar ubicados en un Concello que pertenece a Ardecou «Se pudieron beneficiar ya que se trasladaron al rural y generaron puestos de trabajo. Pidieron una subvención del 50 % y recibieron más de 21.900 euros para poder comprar la maquinaria y preparar el local. «Es un buen ejemplo de cómo desde el rural y desde los Concellos queremos atraer a nuevos promotores, a gente que tenga capacidad para crear riqueza, puestos de trabajo e iniciativas. Apoyamos esta diversificación del rural», apostilla Ricardo González. Explica el alcalde que ambos hermanos están interesados en quedarse a vivir en el concello. Delfín y Preciosa se instalaron antes del verano en Moreiras. «También buscaban un sitio tranquilo y está a solo 7 kilómetros de Ourense, por lo que no han variado su forma de trabajar», añade González.