La Xunta permite a Toén y San Cibrao reabrir la hostelería, pero no a Ourense

María Cobas Vázquez
María Cobas O BARCO

TOÉN

En San Cibrao das Viñas, los restaurantes podrán abrir para dar comidas en el interior
En San Cibrao das Viñas, los restaurantes podrán abrir para dar comidas en el interior MIGUEL VILLAR

Continúan las restricciones de nivel 3 en la ciudad, Barbadás, O Pereiro, Ribadavia y Xinzo

27 nov 2020 . Actualizado a las 16:21 h.

Los concellos de Toén y San Cibrao das Viñas vuelven a nivel 2 de restricciones tres semanas después de que la Xunta decretase el cierre perimetral y obligara a bajar la verja de los locales de hostelería, salvo para servicio a domicilio o para llevar. Los dos ayuntamientos de la almendra de la ciudad se unen a Amoeiro y Coles, que regresaron al nivel 2 ayer. Así lo ha anunciado el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña. En ambos casos la incidencia acumulada de nuevos contagios en los últimos 14 días era muy baja, con uno o dos nuevos contagios en ese tiempo. En ambos municipios, por tanto, la tasa queda por debajo de 100 casos por 100.000 habitantes, que es el nuevo baremo que ha puesto sobre la mesa García Comesaña para levantar las restricciones. El fin del nivel 3 significa que los vecinos de Toén y San Cibrao podrán moverse libremente a otros ayuntamientos en nivel 2, pero solo podrán ir a la ciudad (o a cualquier otro ayuntamiento en nivel 3) para temas educativos, sanitarios o para cuidado de dependientes.

Ourense, Barbadás, O Pereiro de Aguiar, Ribadavia y Xinzo de Limia seguirán igual. Por cuánto tiempo es algo que todavía está pendiente, una vez más, de la evolución de los datos. No solo de los casos activos, sino de la incidencia acumulada a 14 días, el porcentaje de PCR positiva, la incidencia entre mayores de 65 años, y la presión asistencial, según ha remarcado la directora xeral de Saúde Pública, Carmen Durán Parrondo. En todo caso, han dejado claro que la ciudad de Ourense está en el buen camino. De hecho, García Comesaña dijo el lunes en su visita a Valdeorras que la ciudad estaba cerca de conseguirlo. Y todavía sigue en ese camino. No ha habido retroceso, pero el avance es más lento del esperado. En todo caso, ha querido el conselleiro de Sanidade «recoñecer o esforzo dos veciños de Ourense e dos concellos perimetrais». Y ha añadido: «En canto teñamos un pouquiño máis de estabilidade poderemos abrir», para después insistir en que la evolución de la ciudad «é moi boa». La semana pasado Durán Parrondo habló de la buena evolución de la ciudad, pero remarcó la importancia de bajar de 200 en incidencia acumulada a 14 días. La ciudad de Ourense consiguió rebajar esa cifra el lunes; y a dato de hoy incluso está por debajo de 150 (147,2), lo que supone pasar a nivel medio de riesgo según la valoración acordada en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud el mes pasado. 

Pero García Comesaña ha hablado esta mañana de lograr esos valores por debajo de 100. De mantener en el tiempo la evolución actual, la ciudad cumpliría el requisito dado a conocer hoy antes de la próxima reunión del comité clínico, que será el martes.

Sigue la vigilancia en A Rúa y Petín

Una vez más, el conselleiro de Sanidade se ha referido a la situación del brote detectado en A Rúa de Valdeorras, que se ha ampliado a Petín. Ambos ayuntamientos siguen bajo una vigilancia especial. «A evolución non é mala, por iso non se toman medidas adicionais», en palabras de García Comesaña. La directora xeral de Saúde Pública, por su parte, ha apelado a los datos. En Petín se detectó un único contagio en los últimos 7 días (hasta sumar ocho casos activos); mientras que en A Rúa esa cifra es de 18, pero con una «evolución favorable». Aún así, ha recordado, «tenemos el foco» puesto en ambos ayuntamientos.