Pablo Rey lidera en A Saleta un podio copado por los ourensanos

chiqui gutiérrez OURENSE

TABOADELA

Santi M. Amil

Abraham Vázquez y Jorge Fernández escoltaron al piloto de Taboadela

24 ago 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Tal y como acontecía en la que podemos denominar «antigua normalidad», abril de 2019, de nuevo el ourensano Pablo Rey se impuso en la Subida á Saleta este fin de semana.

Y es que el de Taboadela de nuevo firmó los mejores cronos con su Fórmula SMB MKI, lo mismo que había hecho en la anterior edición, repitiendo de nuevo victoria y sumando los primeros puntos de la tabla en el Campeonato de Galicia de Montaña 2020. Fueron dos intensas jornadas de automovilismo de buen nivel, en un trazado clásico que hace poco menos de un mes también era protagonista del Rali de Ourense y que volvió a demostrar que la «nueva normalidad» es más que posible, reanudando las competiciones automovilísticas, si se cumplen las normativas sanitarias a la perfección. Algo que la afición del motor gallego ha demostrado cumplir -y con creces- en las tres pruebas disputadas: Ourense, Ferrol y A Saleta.

En lo deportivo, Rey no lo tuvo muy fácil. Y es que el también ourensano Abraham Vázquez, con un Fórmula Outeda MKIV, ocuparía a la postre la segunda plaza a poco más de un segundo del vencedor, algo que deja bien patente el nivel de competitividad que tuvo la primera cita de la temporada montañera gallega. En el tercer cajón del podio se situó otro piloto local, Jorge Fernández con el CM TCastor 3/C, mientas en la cuarta posición era un ourensano más, Jacobo Senín, a los mandos de una barqueta Norma M20 FC. La quinta posición final sería para el chantadino Miguel Ángel García con otra barqueta similar a la de Senín, para abrir la representación foránea.

El BMW M3 del vigués Jorge Pérez fue el más veloz entre los vehículos carrozados

Además de la disputa entre los fórmulas y las barquetas en el autonómico de Montaña también se puede disfrutar con una atractiva parrilla en el apartado de Carrozados.

Si en la jornada sabatina el veterano Manolo Senra se había impuesto en las dos subidas, para deleite de sus seguidores y simpatizantes, las opciones de disfrutar de las trazadas del siempre espectacular Peugeot 306 Maxi se agotaron en la manga de entrenamientos del domingo, puesto que ya no salió a las cronometradas oficiales.

Así la presión de su máximo rival se convirtió en dominio absoluto del vigués Jorge Pérez, que se alzó con la merecida victoria a los mandos de otro espectacular -y además novedoso- BMW M3 E92 GT4. Dejó atrás a otro correoso perseguidor, el Mini JCW Rally 2 del compostelano Luis Penido, mientras que la tercera posición en el podio era para Javier Carballo con un histórico Ford Escort MKI.

En la clasificación de la Regularidad, el vencedor fue Francisco Javier Leiro y Mario Martínez con un Opel Corsa GSi y los carballiñeses Suárez y Magdaleno firmaron la quinta plaza con el habitual BMW 535i. De los 59 equipos inscritos finalizaron la prueba un total de 49, siendo por tanto diez las bajas finales en la clasificación general.

Colofón

La Subida á Saleta completó así una estimable cifra de veintidós ediciones, resultó todo un éxito deportivo y organizativo, cumpliendo escrupulosamente tanto público, como organización y participantes los protocolos establecidos para que no se propague el covid-19, dejando claro que la esa «nueva normalidad» es totalmente compatible con la práctica de los deportes de motor al aire libre.