El experimento arranca con una explotación y, si funciona, se llevará al resto
19 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.El tratamiento de los purines se ha convertido en uno de los mayores problemas para los ganaderos de la comarca de A Limia, especialmente tras el cierre de la planta que con ese cometido existía en Sarreaus. El sector y todas las Administraciones públicas que operan en la provincia -el Estado, la Xunta de Galicia y la Diputación en representación de ayuntamientos- se han unido en la búsqueda de soluciones para atajar el problema ambiental que ocasiona la actividad agroganadera en el río Limia. El compromiso alcanzado para solicitar financiación de la Unión Europea para un proyecto en esa línea se concretó ayer con la firma de un convenio que, una vez conseguidos esos fondos, servirá para ejecutar las actuaciones previstas. Entre ellas está la creación de una planta piloto de tratamiento de purines, que empezará a probarse este verano.
La fecha la puso sobre la mesa Luis Felipe Fernández, representante de Ecolagunas en el acto protocolario celebrado ayer en la Subdelegación del Gobierno en Ourense. Su empresa, la encargada de ejecutar y explotar esa «depuradora» de purines, estudió soluciones aplicadas en países como Dinamarca, Francia, Israel y especialmente Bélgica. Tras analizar específicamente los residuos que generan las explotaciones de A Limia, se ha diseñado un prototipo que los trata mediante una laguna anaeróbica, un humedal artificial así como elementos para la eliminación del fósforo y un filtro verde.
Ese modelo de depuración se pondrá a prueba en una parcela de Sandiás cedida por el Inorde (Instituto Ourensán de Desenvolvemento Económico). Hasta allí se llevarán los purines de una explotación ganadera de Os Blancos, específicamente seleccionada para participar en este proyecto. En dos o tres meses, según los cálculos del responsable de Ecolagunas, dispondrán de las licencias necesarias y la construcción de la planta tardará otros tres meses, de modo que en torno al verano comenzará a probarse.
En todo caso, «o máis importante», según apuntó Luis Felipe Fernández, será después dar a conocer los resultados a todos los ganaderos de la comarca «para saber se definitivamente isto é unha alternativa máis válida, económica e viable para o tratamento dos puríns». En este sentido, cabe destacar que una de las premisas con las que trabajaron desde el planteamiento inicial del proyecto es que esa solución fuese asequible para que las explotaciones puedan ponerla en marcha sin que afecte a su viabilidad económica. De este modo, se han tratado de minimizar los costes energéticos y constructivos así como de mantenimiento y control posterior de las instalaciones.
Otras actuaciones
La nueva planta de tratamiento de purines es una de las principales actuaciones que se incluyen el proyecto Life Regenera Limia, que cuenta con más de dos millones de euros de presupuesto. Ese dinero servirá, entre otras cosas, para recuperar un meandro del cauce natural del río Limia, cuyo curso está ahora muy modificado, con la intención de mejorar la eliminación natural de nutrientes a través de la aireación, el mismo objetivo que persigue la conversión de una antigua arenera en un sistema lagunar.
Ambos proyectos son responsabilidad directa de la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, cuyo presidente, Francisco Marín, estuvo presente en la firma del convenio celebrada ayer en la Subdelegación del Gobierno. Allí explicó que en los próximos días saldrá publicada en el Boletín Oficial del Estado la licitación de esos dos proyectos, que cuentan con la colaboración de la Xunta, que además evaluará los resultados y el impacto de todo el Life Regenera en la flora y fauna. En verano, según dijo Marín, estarán trabajando en esas actuaciones.
La experiencia piloto busca aplicar métodos naturales y baratos para la depuración
En los próximos días se licitará la recuperación de un viejo meandro del río Limia