La crisis griega se contagia al empresariado de Ourense
SAN CIBRAO DAS VIÑAS
La tragedia griega extiende sus tentáculos allende el mar Egeo. En el país de Tsipras se cuestiona a la Unión Europea y se defiende, con altas dosis de populismo, la individualidad helena. La actitud es contagiosa. Desde hace más de un mes los empresarios de Ourense están enfrascados en unas luchas (más de egos que de fundamentos) que semejan a las que enfrentan a Grecia y la UE.
Fue la asociación del Polígono de San Cibrao (secundada posteriormente por las de otros polígonos), la que levantó una bandera de protesta contra la Confederación de Empresarios de Ourense (CEO). Sirvan de ejemplo estos titulares de La Voz de Galicia: «El sector empresarial de Ourense saca músculo al margen de la CEO» y «San Cibrao impulsa una marca propia para los polígonos al margen de la CEO». ¿Qué lleva a los empresarios de San Cibrao a postularse «al margen de la CEO»?
Se me ocurren dos razones aunque la real seguro que es inconfesable. Una, las ansias de figurar de Elías Mera, el presidente del polígono, y, otra, la tremenda debilidad que afecta a la CEO desde que José Manuel Pérez Canal llegó a la presidencia y la sumió en una alianza empresarial gallega de incierto recorrido. A Pérez Canal se le rebela la asociación que, por diez votos, le dio la presidencia en el 2013. «Estamos encantados coa súa vitoria; para nós foi unha gran alegría», decía el hoy díscolo Elías Mera que se dedica a dinamitar la unión del colectivo en lugar de reconocer el error de poner en la presidencia a una persona que, como explicaría con maestría el profesor Ennes (véase la página 12 de esta edición), tiene potestas (el cargo, la capacidad legal) pero carece de auctoritas (saber, valía, autoridad moral). Miguel Otero, investigador de Economía y Política Internacional del Real Instituto Elcano, decía en La Voz sobre la cuestión griega: «Es una batalla entre la democracia griega y otras dieciocho democracias». Trasladando la lectura a Ourense, la crisis empresarial es una batalla entre la asociación de Elías Mera y las restantes de la CEO. Lo malo es que estas tensiones y pulsos no traen beneficios para ninguna de las partes. Ya lo decía Esopo en una de sus fábulas: «La unión nos hacen tan fuertes como débiles la desunión». Lo que rubricó Esopo hace más de 2.500 años en Grecia, no se quiere entender así ni en su país natal ni en el Ourense de nuestros amores (y calores).
Pantomima Así definió la diputada Laura Seara el viaje del alcalde de Ourense a Madrid para entrevistarse con la ministra de Fomento. Y no le falta razón. A su regreso, el Concello informó de las gestiones: «Alcalde e ministra acordan constituír este mes a comisión para a integración do tren de alta velocidade na cidade». Tras la visita de Ana Pastor a Ourense el pasado 21 de junio titulaba La Voz de Galicia: «Anunció la constitución de un grupo de trabajo con Xunta, Diputación y Concello para concluir la integración del AVE». A la vista de la igualdad de conclusiones, ¿cuál fue la razón del viaje a Madrid? ¡La foto! La suerte del regidor es que ahora la oposición municipal, como ya le paga el PP lo que querían, está de vacaciones dejando su función a la tenaz diputada socialista.