
El río Maquiáns está completamente seco y el depósito municipal se surte del suministro de los concellos limítrofes de Beade y Carballeda de Avia
12 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.El Concello de Ribadavia declaró este jueves el nivel cero del plan de emergencias municipal y la alerta por sequía, debido al empeoramiento de la situación del depósito de A Franqueirán, que se abastece del río Maquiáns, hoy seco. Este viernes se cumple una semana de los primeros cortes en el suministro y los trabajos de recuperación del caudal llevados a cabo, de día y de noche, no han sido suficientes.
La empresa concesionaria Aqualia afirma que, tal y como están las cosas, ya no puede garantizar el servicio y, aunque ha propuesto cortes más restrictivos, desde el Concello señalan que intentarán mantener los actuales —hay cuatro horas de agua al día— para perjudicar lo menos posible a los vecinos y empresarios del municipio.
El consumo actual de agua en Ribadavia ronda los 500.000 litros en cada apertura de la traída —hay dos al día—. El problema es que sale más agua de la que entra, unos 200.000 litros como máximo en 24 horas. El recurso hídrico procede de depósitos de los concellos limítrofes de Beade y Carballeda de Avia, que se han prestado a colaborar con Ribadavia dada la difícil situación. «Agora mesmo non podemos garantir a auga para mañá. A situación é crítica», señalaba este jueves la alcaldesa, Noelia Rodríguez.
Para paliar la falta de suministro, el Concello estableció más de 25 puntos de reparto de agua repartidos por todo el municipio. Se trata de unos depósitos fijos en la calle para uso doméstico que, señalan, podrían ampliar a más zonas. No es potable y solo está prevista para la higiene y la limpieza.
Agua embotellada
A mayores, Aqualia prosigue con el reparto de agua embotellada entre los vecinos. Aunque en un principio se va a mantener el mismo horario de apertura: dos horas por la tarde y dos por la mañana, el Concello no descarta dejarla reducida a una franja horaria. Dependerá de la cantidad de agua que pueda almacenar el depósito, por lo que apelan a la concienciación ciudadana. Este mismo jueves se clausuró el área de limpieza de coches de una gasolinera de la localidad, por la cantidad de usuarios que hacían cola.
Con el visto bueno de la Xunta y la Confederación Hidrográfica del Miño-Sil, el Concello de Ribadavia comenzará cuanto antes a coger agua de los ríos Miño y Avia, que llegará al depósito ribadaviense para ser tratada. En ese sentido, y con el plan de emergencia por sequía, el Concello recuerda que todas las administraciones están obligadas a dotar de medios para poder llevar a cabo estos trabajos.
Ahora mismo necesitan camiones cisterna y motobombas para poder recoger el mayor número de litros de agua. A corto plazo, desde el gobierno local se trabaja en una captación provisional y de emergencia directamente desde el río Avia. A largo plazo, y con una planificación algo mayor, prevén que la traída de agua se haga directamente desde el Miño.