Denunciado un pontevedrés de 28 años por circular a 211 kilómetros por hora en Ribadavia

La Voz OURENSE

RIBADAVIA

GUARDIA CIVIL DE TRÁFICO

El radar que sorprendió a este automovilista de Gondomar había detectado el día anterior a otro conduciendo a 230

27 ene 2022 . Actualizado a las 20:21 h.

Los excesos de velocidad con personas jóvenes al volante de automóviles empiezan a alertar a los agentes de la Guardia Civil de Tráfico. Esta semana, en apenas dos días, han sido denunciados dos automovilistas que rebasaban, y por mucho, la velocidad máxima permitida. Ambos en la provincia de Ourense y los dos por un mismo radar, instalado en Ribadavia

La última incidencia se constató a las ocho de la tarde del martes, 25 de enero. Los agentes del destacamento estaban realizando un control cuando detectaron un BMW que circulaba demasiado deprisa. El cinemómetro marcó 211 kilómetros por hora, en un tramo en el que la máxima permitida es de 120, por lo que los integrantes de una patrulla le dieron el alto al conductor. Se trataba de un joven de 28 años, vecino de la localidad pontevedresa de Gondomar, que enseguida fue informado de que iba a ser denunciado al juzgado por un delito contra la seguridad vial, al haber superado en más de 80 kilómetros/hora la velocidad genérica marcada en el tramo. Al conductor se le instruyó un atestado que ya está en manos del juzgado de Ribadavia, en el que tendrá que comparecer. 

Apenas veinticuatro horas antes, y en el mismo punto, había sido interceptado también otro conductor que circuló a 230 kilómetros por hora. Esta circunstancia, alertan desde el subsector de Tráfico «nos lleva a pensar que los jóvenes no tienen la misma percepción del riesgo que conlleva la velocidad, en caso de sufrir un accidente». Por ello, hacen un llamamiento a la «prudencia» y recuerdan que las consecuencias de las lesiones y daños sufridos en los siniestros viales son directamente proporcionales a la velocidad de los vehículos.

Conductas como las protagonizadas por estos dos conductores están castigadas en el Código Penal con penas de prisión de tres a seis meses, multa o trabajos en beneficio de la comunidad. En todos los casos habrá pérdida de permiso de conducir.