El inicio de la fase cero levantó pocas persianas en las principales villas de la provincia
05 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.El ralentí de la capital también se vivió en las cabeceras de comarca en el inicio de la desescalada.
«Hay quien ha abierto, pero la mayoría de la gente va a esperar al día 11, porque atender solo con cita previa le complica el trabajo», decía Sandra Moldes, presidenta del CCA de O Barco. Aseguraba que los comerciantes no creían que la gente recurriese a la cita previa para ir a probarse ropa. Además, apuntaba que los comerciantes están a la espera de tener más claras qué medidas de seguridad son precisas en cada negocio antes de levantar la persiana.
En similares términos hablaba José Ángel Rodicio, presidente de Aever en Verín. «La gente tiene muchas ganas de abrir pero hay mucha incertidumbre sobre cómo hay que hacerlo», decía. Y lo mismo sucedía en Xinzo, según el presidente de Prolimia, Amador Conde. «Coa cita previa non lles compensa abrir, e creo que moitos están á espera de ver o que facían os demais, pero só abriron os que xa viñan abrindo», decía.
En O Carballiño, las incorporaciones a la actividad fueron mínimas. Julián Garriga, del Centro Comercial Aberto apuntaba que «fueron pocos nuestros asociados que abrieron, quizás sea el próximo día 11 cuando se sumen más comercios del textil y algún que otro bar».
Ribadavia
El Concello de Ribadavia destinará 100.000 euros para la cobertura de gastos fijos de Autónomos y PIMES. Para llevar a cabo esta medida, celebrará un pleno extraordinario el próximo 7 de mayo, con el fin de aprobarla.