«Cada peza podía levarme un día»

e. filgueira OURENSE / LA VOZ

RIBADAVIA

Agostiño Iglesias

Julio Dabarca elaboró el belén que el Concello de Ourense acaba de reconocer como el más original

27 dic 2018 . Actualizado a las 19:55 h.

«Yo creo que lo celebraremos organizando una buena merienda con todos», cuenta Isabel González, una de las trabajadoras de la Residencia Santa Cruz. Y es que el Concello acaba de otorgarles al belén que este año tienen expuesto el premio del concello a la representación más original del nacimiento de Jesús. «Nosotros llevamos unos años participando en el concurso del ayuntamiento pero con unas figuras de cerámica normales. En esta ocasión, el carpintero que talló las piezas decidió cedérnoslas durante estas fechas», explica.

Comenzaron a colocarlo en el mes de octubre y hasta principios de diciembre no estuvo todo en su sitio. «Los que podían participaban en la decoración y los que no también disfrutaban mirando cómo lo hacíamos», añade.

El carpintero se llama Julio Dabarca Cuíñas (Francelos, 1960) y ya había expuesto su obra en Ribadavia -el Club Artístico un año y en la iglesia de Santa Magdalena otros tres-. «Cada peza podía levarme un día enteiro e primeiro fíxenas en madeira de cerdeira e castaño. En total hai cento dez personaxes, sen contar cos emprazamentos como o castelo, o portal ou os talleres dos artesáns. Ao principio só estaban barnizadas pero non me gustaban moito e rematei pintándoas para que se distinguisen mellor», resume el artífice sobre su obra.

Esta representación de la Navidad no es original solo porque lo diga el premio que el Concello acaba de otorgarle, sino porque en ella aparecen diferentes símbolos de Ribadavia como el castillo o la Tafona de Herminia -conocida porque elabora dulces judíos típicos-. No existen dos figuras iguales, todas tienen características diferenciadoras. «Fun ampliando as pezas pouco a pouco e cada ano incorporaba máis para que a xente se animase a visitalo e descubrir aos personaxes novos», confiesa el artesano que trabajó durante años en una fábrica elaborando ataúdes.

El punto de inflexión para pasar de los féretros al belén fue una incapacidad tras una operación y mucho tiempo libre para seguir haciendo lo que le gusta. «Non quería deixar de tallar e tiña visto algún outro belén que me pareceu bonito así que animeime», cuenta Dabarca.

«¿Gañaron o premio? Eu non sabía que participaba nun concurso. ¡Pero mira que ben! Porque failles falta para os velliños», afirma tras enterarse del galardón.

Se puede visitar por la mañana hasta las 13.00 horas y por la tarde de 15.00 a 19.00 horas.

Resto de belenes

En el certamen había tres categorías más a concurso en las que se podía optar a primer y segundo premio. Por un lado estaba la categoría familiar, en la que los vencedores fueron los Vázquez Barreiro y los Torres Santiesteban. Por otro, la categoría de centros escolares, en la que Franciscanas y Cardenal Cisneros consiguieron el primer y segundo puesto, respectivamente. Y por último la categoría de las entidades sociales que quisieran participar, en la que la Residencia Nosa Señora da Esperanza y la parroquia de los Padres Franciscanos consiguieron el primer y segundo puesto. Todos ellos estarán abiertos al público.

De tallar ataúdes en una fábrica a recrear el nacimiento de Jesús

Julio Dabarca (Francelos, 1960) trabajó durante varios años en una empresa que fabricación de féretros en Ribadavia y sigue participando en la organización de la Festa da Istoria organizando talleres para mostrar el oficio. Tras exponer su belén varios años en el municipio, estas Navidad lo cedió a la Residencia Santa Cruz.