Los jardinillos de Ribadavia

Luis Gulín EL DESCORCHADOR

RIBADAVIA

08 ene 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La idea de los jardinillos en Ribadavia surgió en la primavera de 1930 cuando se eliminó el Salón Teatro que ocupaba un gran espacio delante del Castillo. Jesús Sánchez, el propietario del antiguo espectáculo, presentó un proyecto de zona verde y recreativa que abarcaba la zona alrededor del Castillo. La idea se retomó al finalizar la Guerra Civil pero en su ubicación actual, siendo construidos los Jardinillos en el año 1940 por Gudarís, soldados vascos prisioneros de la guerra civil, acomodados de aquella en la Fundación Martínez Vázquez (hoy Museo Etnolóxico), entre ellos probablemente un familiar de un ex lehendakari. Todas esas obras fueron realizadas bajo la supervisión del mencionado Jesús Sánchez.

Eran alrededor de cuarenta hombres que participaron en la construcción y plantación de los distintos árboles que todavía existen hoy en día. Eran integrantes de los Batallones de Trabajadores de la dictadura franquista que eran utilizados como mano de obra para la reconstrucción de infraestructuras. En el año 1939 se inició el Sistema de Redención de Penas, mediante el cual se descontaban días de condena por días de trabajo, sistema en vigor hasta el año 1943 cuando alcanzó su esplendor la explotación de mano de obra de prisioneros vascos. De esta situación se beneficiaron las diputaciones, los ayuntamientos, la Iglesia católica, las empresas e incluso los particulares. Por eso sería de justicia en poner al lado del monolito, conmemorativo de la Constitución de 1978, alguna placa recordatoria de esa etapa de nuestra memoria histórica.