Casi mil ourensanos estudian en los conservatorios

María Cobas, Mar Gil, X. M. R. OURENSE

RIBADAVIA

En O Barco de Valdeorras, los escolares dan varios conciertos a lo largo del curso.
En O Barco de Valdeorras, los escolares dan varios conciertos a lo largo del curso. lolita vázquez< / span>

Los Concellos de Verín Xinzo, O Carballiño, Ribadavia y O Barco soportan el servicio en solitario; en Ourense paga la Xunta

17 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Cerca de un millar de ourensanos están matriculados en los conservatorios de Ourense, O Barco, O Carballiño, Ribadavia, Xinzo y Verín. En todos pueden cursar el grado elemental y el profesional, salvo en el verinense, donde solo imparten el elemental. Ya para dar el salto al grado superior, deben trasladarse a los centros de Vigo o A Coruña.

La mitad de los alumnos acuden a clase en el conservatorio de la capital. Son 497 estudiantes, a los que dan clase 53 profesores, en las especialidades de acordeón, canto, contrabajo, clarinete, clave, fagot, flauta de pico y travesera, gaita, guitarra, oboe, órgano, percusión, piano, saxo, trompa, trombón, trompeta y tuba, viola, violonchelo y violín. Todo ello en un servicio que está sufragado directamente por la Xunta (a quien los alumnos pagan su matrícula). Es el único de estas características, el resto de los que hay en la provincia son sustentados de manera íntegra por los diferentes ayuntamientos.

Las matrículas de los alumnos son una parte del presupuesto en Verín, Xinzo, O Carballiño, Ribadavia y O Barco, pero que en el mejor de los casos no llega al 22% del coste total. El resto sale de las arcas municipales, en un servicio que los ediles de cultura coinciden en señalar como un «lujo» al que no piensan renunciar. Y eso a pesar de que no es una competencia propia y que supone un importante desembolso de dinero público cada año. Una situación que lleva tiempo sobre la mesa y que vuelve a surgir de cara a que en abril tendrán lugar las pruebas de acceso para el grado profesional.

En O Barco de Valdeorras, los 91 alumnos que estudian con 11 profesores (hay además una escuela de música) suponen un desembolso de 230.000 euros. «Antes a Deputación implicábase, pero agora ninguén, parece que queren que desaparezan os conservatorios», apunta la edila de Cultura, Margarida Pizcueta, que señala que el conservatorio se lleva buena parte del presupuesto de su departamento. «É un luxo, pero imprescindible», añade. En Ribadavia destinan 167.000 euros para pagar a los 9 docentes que dan clase a un total de 153 alumnos. En O Carballiño son 87 estudiantes y 9 profesores, mientras que en Verín son 42 alumnos y 6 profesores. En breve se trasladarán al Centro das Artes, lo que les permitirá disfrutar de mejores instalaciones, tal y como destaca la edila de Cultura, Emilia Somoza. «A Deputación dotou aos pobos do servizo e despois deixárono aí... A ver se se involucra», añade.

En todos los casos los alumnos no son únicamente del concello en cuestión, sino que el servicio es utilizado por personas de toda la comarca e incluso de fuera de ella. Por eso desde los concellos reclaman que haya un apoyo de otras administraciones.

El tema sobre la financiación no es ajeno al debate político. El PSOE lo llevará al Parlamento. La ourensana Noela Blanco presentó una iniciativa para reclamar «un acordo de financiamento [entre concellos, Deputación e Xunta] para garantir a viabilidade dos conservatorios».

Luis Miguel Gil, concejal de Cultura en Xinzo: «A idea é que a Deputación se involucre, que se faga un consorcio e entren máis concellos»

En el conservatorio de Xinzo estudian un total de 122 alumnos, a los que les imparten clases de flauta travesera, piano, saxofón, clarinete, guitarra, viento metal, violín, violonchelo y viola, además de iniciación a la música, un total de 8 profesores. El conservatorio fue noticia a principios de curso porque hasta 12 personas quedaron fuera por falta de plazas, que finalmente están estudiando en la escuela de música que creó la Diputación. El edil de Cultura, Luis Miguel Gil, defiende que ya es hora de sentarse a hablar y mirar qué va a pasar el próximo curso. «Estou pendente dunha reunión na Deputación para tratar o tema», avanza, para explicar después que aunque asumen alumnos de buena parte de la provincia, ninguna otra administración aporta dinero para sufragar el coste del profesorado.

«A idea é que a Deputación se involucre, e que se faga un consorcio con todos os conservatorios, e entren máis concellos; porque oxalá se poida abrir o conservatorio a máis alumnos, pero non pode ser así, que cos impostos dos veciños se pague para todos», defiende Gil. También cree que sería bueno involucrar a los demás ayuntamientos afectados. «Por que non pode ser que o Concello de Allariz pague un profesor destinado en Xinzo se os alumnos veñen aquí estudar? Ou porque non o vai sufragar un profesor a Deputación para dar un servizo a varios concellos?», defiende. Actualmente hay 17 estudiantes que van desde Allariz, y 13 que llegan desde Verín, y así desde varios puntos más de la provincia. «Eu teño a instalación e oito profesores, a partir de aí, que se mollen o resto; nós oxalá puidésemos ter máis alumnos, pero non podemos». Cada año, en los presupuestos se reserva una partida de casi 200.000 euros para afrontar los gastos. «É un luxo, pero non pensamos en prescindir del», dice.