La falta de recursos mantiene cerrados centros de interpretación

xosé manoel rodríguez OURENSE / LA VOZ

RIBADAVIA

MIGUEL VILLAR

En Ourense hay 33 instalaciones de este tipo, la mayoría sin uso

08 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Galicia padece una invasión de centros de interpretación. Fueron naciendo con el apoyo de la Xunta y vinculados a los espacios naturales, de forma preferente, y la llegada de los fondos europeos hizo que a partir del año 2000 se diese una proliferación excesiva, con espacios creados sin una planificación adecuada, en muchos casos con unas inversiones y unos edificios desmesurados y sin recursos ni personal para hacer frente a los objetivos para los que fueron creados. Sobre la situación, evolución y realidad de los centros de interpretación versa un estudio realizado por Araceli Serantes, investigadora de la Universidade de A Coruña y doctora en Ciencias da Educación.

En Galicia existen 188, de los cuales 33 se encuentran en la provincia de Ourense. La mayor concentración está en las franjas costeras y, en el caso de la provincia en Ourense (4) y Ribadavia (3). Serantes constata que la gran mayoría de los proyectos partieron de iniciativas locales y que «ata nun 70% foron financiados con fondos europeos», al argumentar aspectos como el fomento del turismo y el desarrollo local. La investigadora también señala que los concellos solo piensan en cuánto les costará el centro «pero non reservan cartos para os dotar de persoal e polos en marcha». El resultado es conocido: centros sin rematar y cerrados en su mayor parte.

En el caso de la provincia de Ourense hay, junto a los dedicados a los espacios naturales, centros del «cogumelo, pemento branco, contrabando, castaña, olivo, do patrimonio natural autóctono, da vida monástica, do mel, do viño ou dos xudeos, entre outros». En su estudio, Araceli Serantes destaca algún caso «casi cómico» que experimentó -como cuando se enteró de la existencia del Centro de Interpretación do Pemento Branco «e cando vou alí ver quen o xestiona, descubro que o Concello non sabe nada»-, incide en la inconveniencia de determinadas políticas. Como crear un centro de parques naturales en Ourense, inacabado: «Pecháronse todas as aulas da natureza dos parques naturais galegos pero hai cartos para facer iso».

En el extremo opuesto destaca ejemplos como Santa Leonor, de Trives, por sus contenidos, su adecuación al entorno y sus propuestas dinamizadoras.

En sus conclusiones, además de incidir en la situación alarmante y de no ajustarse la oferta a la demanda real, propone crear una Rede Galega de Centros de Interpretación y realizar una planificación conjunta de usos y servicios para crear nuevos productos turísticos.