Sale de la vía, deja el coche y se va a dormir a su casa

La Voz

QUINTELA DE LEIRADO

cedida

La Guardia Civil montó un operativo para localizar al propietario de un vehículo accidentado

10 sep 2018 . Actualizado a las 08:31 h.

Una conductora avisaba a primera hora de hoy a la Guardia Civil, al Subsector de Tráfico, dando la voz de alarma por un accidente ocurrido en la carretera que una Quintela de Leirado con Frieira. Según la Guardia Civil la mujer alertó de que «un vehículo todoterreno se encontraba volcado fuera de la carretera, que estaba en un barranco y que desde su posición no podía precisar si se encontraba alguien en su interior. Que iba a llamar a su marido para que bajase por la ladera y comprobase si había víctimas». Tras la llegada de su marido y la inspección del lugar el matrimonio trasladó a la benemérita la situación: dentro del coche no había nadie y el accidente debía haber ocurrido de madrugada. «Inmediatamente y, sin que, a priori, se pudiera descartar que el conductor pudiera hallarse malherido o fallecido entre la abundante maleza existente en la zona, se movilizó una patrulla de motoristas del destacamento de tráfico de Ourense y una unidad de bomberos del parque comarcal de Terras de Celanova, que coordinaron un dispositivo de búsqueda por las inmediaciones del lugar del siniestro. Al mismo tiempo y, desde COTA, se efectuaron varias llamadas telefónicas al número de teléfono que figuraba como contacto del titular, sin que se obtuviese respuesta». Tras peinar la zona los agentes de la Guardia Civil se dirigieron al domicilio del dueño del vehículo y al llegar a As Canles (Padrenda) los vecinos aseguraron que el dueño del coche se encontraba durmiendo y que nadie respondía al teléfono porque sus padres se habían ido a misa a Os Milagros. Desde la Guardia Civil se agradeció expresamente la colaboración del matrimonio que alertó del accidente y se indicó que «aunque este siniestro se ha saldado sin víctimas, lo cierto es que se han movilizado innecesariamente distintos recursos y servicios de las administraciones, lo que suponen un importante gasto económico y la detracción de personal y medios que pudieran estar auxiliando a otros ciudadanos que sí pudieran necesitarlos. Todo por no realizar una llamada gratuita al 112».