Recuperan la ruta de los rosqueiros

christian rodríguez / c. c. MONFORTE / LA VOZ

PARADA DE SIL

CEDIDA

La asociación de vecinos de Barantes finaliza el acondicionamiento de un camino junto al cañón del Sil que antaño se utilizaba para el transporte de mercancías

23 ago 2019 . Actualizado a las 18:18 h.

El Camiño da Empardeada era un sendero que recorrían en tiempos los rosqueiros de Sober antes de cruzar el río para ir a las ferias de Parada de Sil y Castro Caldelas. Ahora la comunidad de propietarios del monte de Barantes ha conseguido convertirlo en una ruta de senderismo y rescartarlo del olvido con la ayuda de la Xunta. Este sábado a las 9.00 horas la asociación presentará oficialmente la ruta en la iglesia de San Xoán de Barantes, lugar desde el que partirán los asistentes que realizarán el recorrido.

En diciembre de 2018, la Consellería de Medio Ambiente financió el acondicionamiento de esta ruta con una subvención de 12.000 euros dirigida a preservar la biodiversidad y mejorar los espacios enmarcados en la Red Natura 2000. Para el pasado mes de mayo ya se había señalizado uno de los más de tres kilómetros que conforman la ruta da Empardeada y en la actualidad se ha completado la instalación de veinte indicadores de madera, nueve señales direccionales y cuatro mesas informativas a lo largo de todo el recorrido.

Los vecinos de la parroquia de Barantes utilizaban este recorrido para llegar al lugar de Os Pousos, donde la barca do Barril les permitía cruzar el río para llegar a la orilla opuesta. Esta barca tuvo actividad hasta la construcción del embalse de Santo Estevo. El sendero se asienta sobre un terreno escarpado y de gran riqueza paisajística, donde el caminante puede pasar de contemplar una vasta extensión de viñedos a atravesar un bosque de encinas y alcornoques propio del Mediterráneo en cuestión de metros. La ruta tiene una dificultad entre media y alta.

El plan actual contempla un recorrido de ida y vuelta de unos siete kilómetros en total, pero la intención de la asociación es «crear un enlace coa ruta do Eucalipto de Bolmente para facelo circular», apunta Xesús Verao, miembro de la asociación de vecinos de Barentes. Verao destaca que la ruta da Empardeada tiene muchas posibilidades, como la visita al castro de Vilanova, para la que contempla un desvío al inicio. «É unha alternativa aos miradoiros e os catamaráns para gozar do Canón do Sil», añade.

Desde la asociación de vecinos de Barantes agradecen la ayuda recibida de la administración para poner en valor este recurso visitable en la zona. «O noso deber agora é manter ben conservado o entorno e evitar que sexa maltratado como ocorre con outras rutas financiadas polo público», afirma Verao. En el corto plazo tienen la intención de editar un folleto informativo, aspecto que no pudieron llevar a cabo todavía por falta de tiempo.

Una histórica vía de transporte

La ruta comienza en el cruce de la pista acondicionado con el camino que va a Ribá y A Somoza. A unos veinte metros aparece un panel informativo que indica el desvío a la derecha hacia el castro de Vilanova. Al adentrarnos en A Barrionca, donde empiezan a predominar los viñedos, la gran mayoría ya abandonados, tomaremos el camino de la derecha para ir a los lugares de Bacelo de Riba, Leiredo, Viña Vella y, antes de llegar a Os Groís, merece la pena hacer un alto en el camino para admirar el Cañón. A un lado, el mirador de Cadeiras en Sober; y al otro, los Balcones de Madrid y el monasterio de Santa Cristina.

Era hasta el lugar de Os Groís adonde podían llegar los carros de madera con las uvas, pues a partir de aquí comienza un tortuoso descenso. La uva aquí debía ser cargada en cestos a la espalda. Una vez en el llano el camino se adentra en un bosque mediterráneo poblado por encinas, alcornoques e higueras. Tras pasar el Regato da Bemposta, más adelante encontraremos el camino a la izquierda va a dar a Os Pousos y termina en el Sil. En este punto embarcaban los feriantes para cruzar a la orilla ourensana y también desembarcaba el ganado traido de Caldelas o la madera de castaño extraida de los extensos sotos. En tiempos también había una chabola donde el barquero se resguardaba de la lluvia. A la derecha, seguiremos por A Empardeada hasta alcanzar O Marcozón, lugar donde se dividen las parroquias de Barantes y Bolmente.

Este paraje fue aterrazado para la plantación de viñedos entre gruesos muros de piedra. El lugar fue excavado en roca viva formando bancales. La ruta da Empardeada se enmarca en el lugar de interés comunitario del cañón del Sil y en la red de protección Natura 2000 debido a su gran biodiversidad y la presencia de especies autóctonas como una lavanda -o cantroxo- exclusiva de esta zona de ribeira.