Una magistrada de Ourense aún no ha podido juzgar a cuatro acusados de falsificar prendas de ropa de lujo casi seis años después de que fueran detenidos
OURENSE CIUDAD

Este lunes la vista se suspendió por cuarta vez debido a la baja de una de las abogadas personadas en la causa, en la que se mantienen Nike y Nintendo
13 may 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Cuarta suspensión en los últimos dos años del juicio contra cuatro acusados de distribuir prendas de ropa falsificadas. Después de tres aplazamientos, uno en el 2023 y dos a lo largo del 2024, este lunes tampoco ha sido posible celebrar la vista. En la anterior ocasión el aplazamiento lo forzó uno de los acusados, al que se considera cabecilla del grupo criminal, quien se negó a aceptar un acuerdo de conformidad. Ahora la causa de la suspensión ha sido la baja de una de las abogadas, que se encuentra en avanzado estado de gestación. Habrá un nuevo intento, que será ya el quinto, en el mes de diciembre.
Para entonces habrán pasado seis años desde la operación de la Guardia Civil que originó este caso, que supuso la incautación de ocho mil prendas de ropa falsificada. Todo comenzó a mediados del año 2019, cuando los investigadores de la Guardia Civil de Verín empezaron a sospechar que en el municipio operaba una red dedicada a la distribución de ropa ilegal procedente de Portugal. La operación desarrollada el 6 de septiembre así lo confirmó. Aquel día, previa orden judicial, los funcionarios del instituto armado realizaron registros en unos almacenes de la localidad, en los que encontraron ropa que simulaba ser de marcas conocidas, algunas de lujo, pero que en realidad eran copias. También se incautaron de este tipo de artículos ilegales en negocios que la red tenía en las localidades de Xinzo, Ponferrada y Santander.
Dos años y medio de cárcel
Los presuntos responsables de aquella trama, Juan S. Á., Félix R. P., Henrique R. A. y Josué P. P. deben responder ante la justicia por el delito contra la propiedad industrial que les imputa la Fiscalía provincial. Se reclama para los investigados una condena de dos años y medio de prisión y una multa, para cada uno, de 6.500 euros.
A mayores, varias marcas de alta gama afectadas en este asunto se personaron como acusación particular y pidieron ser indemnizadas, aunque a día de hoy algunas de las firmas de lujo que inicialmente estaban en la causa se han retirado. Quedan en ella las firmas Nintendo y Nike, esta última una de las más afectadas por la actividad ilegal de los sospechosos. De ser condenados los acusados deberán indemnizar a esta compañía textil con 28.000 euros.
En aquella macro operación los agentes de la Guardia Civil se incautaron de 5.000 pares de calcetines de la marca Adidas, más de dos mil prendas de ropa interior de Calvin Klein y prendas deportivas que simulaban ser de equipos como el Fútbol Club Barcelona. Otras de las firmas que habían sido copiadas en fábricas del país vecino para su distribución en España eran Ralph Lauren, Tommy Hilfiger, Levis, LOL Surprise y Lacoste.