El Seixalbo agita con fuerza la bandera de la deportividad

OURENSE CIUDAD

Futbolistas del Seixalbo celebran su temporada como equipo menos tarjeteado del grupo de Primera Galicia
Futbolistas del Seixalbo celebran su temporada como equipo menos tarjeteado del grupo de Primera Galicia MIGUEL VILLAR

La escuadra de O Carqueixal fue la menos amonestada en el grupo de Ourense de la Primera Galicia

04 jun 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

La primera plantilla del Club Deportivo Seixalbo confirmó su permanencia en la Primera Galicia en la última jornada, tras confirmar que no se vería afectado por los arrastres de la Preferente Sur. Era el objetivo prioritario y exigente para un plantel que ni cobra gratificaciones ni entra en una vorágine de fichajes por la que sí apuestan otras entidades. Y aún así, se muestran ilusionados por otro logro que en muchos casos pasa desapercibido, porque fue el equipo que menos amonestaciones arbitrales recibió a lo largo del curso.

Su presidente, Maxi Cid, tiene claro que ese es un motivo de orgullo muy importante para su modesta estructura: «Este es un proyecto socioeducativo que va más allá del deporte en sí. Queremos propagar unos valores entre los que también está el emplearse con deportividad, por muy necesitados de puntos que estemos».

También habla claro al respecto Diego López, un capitán de sobra conocido en el panorama del balompié ourensano, después de portar el brazalete en un Barbadás en el que ya militó durante una década: «Fui capitán varios años también allí y me marché para estar dos años en el Arenteiro, después fue cuando vine a Seixalbo en el 2015, porque soy de aquí y me identifiqué pronto con lo que proponían».

Fue el propio zaguero el que aportó la idea de sancionar de algún modo a quienes fueran castigados por los árbitros, en el transcurso de la competición: «En realidad fue muy sencillo y, aunque lo dije yo fue aceptado de inmediato por todos. Se trataba de hacer un bote con un euro por tarjeta amarilla, tres por una roja y también por una amonestación del tipo encararse con el rival o comportarse de modo violento. Sin ningún reproche, todos recordaban siempre que había que pagar de inmediato».

Además, por encima de la típica cena con recaudaciones de ese tipo que se repiten en otros clubes, en el caso del Seixalbo, también se aprovechó para un segundo objetivo, como recuerda el propio López González: «Al final del cada temporada lo decidimos, pero ya lo hemos dedicado a colaborar con espinilleras nuevas para un club femenino argentino, con jugadoras indígenas, con el cual contactamos hace tiempo. También lo dedicamos otro año a un regalo para un compañero que tuvo gemelos y le venía bien, como intentaremos favorecer también a otra persona más esta vez».

En una liga de 34 partidos, el Seixalbo solo recibió 68 amarillas y 3 tarjetas rojas. El equipo que más se acercó a esos registros fue el campeón Allariz, que sumó seis amarillas más. Diego arrima el ascua a su grupo y destaca: «Me parece que tenemos más mérito, porque no es lo mismo mantener el tipo cuando las cosas no te salen o estás más apremiado por la clasificación que en el caso del primer clasificado, de todos modos, es algo de lo que también hablamos a lo largo de la temporada».

Y es que, si no se entrena, la deportividad sí puede convertirse en un objetivo tan valioso como el que dicta la clasificación: «Nuestro club tiene unos valores bien definidos y eso lo sabe cualquier entrenador que viene aquí. En cuanto a los jugadores, tenemos más en cuenta la forma de ser de cualquier posible refuerzo que su potencial deportivo. Realmente la clave es que somos una familia, más que un equipo».

Volviendo al máximo responsable de la directiva, Maxi explica que para la entidad es un orgullo contar con jugadores que son un ejemplo en su comportamiento: «Tenemos otras metas, como integrar extranjeros o personas con alguna discapacidad, utilizando el deporte y sus beneficios. Queremos ganar, pero no es lo prioritario».