Enchufadas

Maite Rodríguez Vázquez
Maite Rodríguez EL ÁBACO

OURENSE CIUDAD

08 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

La gente lo cuenta en petit comité, pero no es frecuente esa sinceridad en declaraciones a los medios. Me refiero a la frase de la mujer que, en una entrevista a La Voz, reconoció que había tirado de enchufe para que le adelantaran unas pruebas para un tumor en un seno. Los que lo necesitan y pueden hacerlo, lo hacen. Otros nos tenemos que quedar esperando el turno y confiando en que la administración sanitaria funcione. Y esté atento, oiga, porque si no revisa el estado electrónico de su expediente o solicitud quizás esté paralizado desde hace semanas y necesite que alguien se lo empuje. En general, las cosas funcionan razonablemente bien. Solo en general. Hay sitios peores. Pero cuando a uno le toca un problema y hay desinterés o desatención en la gestión de los servicios públicos, es natural el enfado y la búsqueda de soluciones, aunque no sean las más éticas o públicamente confesables. Hay una parte de la condición humana que nos conduce a comportarnos así, del lado del administrado y en el del servidor público. Mientras sea para ayudar a alguien en un apuro de salud serio como el de la entrevistada es comprensible. No lo es tanto para cosas menores que atrasan a los que siguen esperando o lo van a solicitar, aunque me da la impresión que siempre se reservan huecos en las agendas públicas para atender imprevistos, urgencias o enchufes. Lo lamentable es que Ourense desde hace tiempo, desde los años de Baltar padre y antes, fue conocida por su enchufismo en los puestos públicos. Una práctica que, visto lo visto, no está erradicada y se utiliza para múltiples fines. Llámelo enchufe, contactos o jeta.