Un policía de Ourense absuelto en la Zamburiña, tras el fallo definitivo del Supremo: «Esta reparación ya no me vale»

M. Rodríguez OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

El inspector del CNP, Antonio Rodríguez, durante el juicio por la operación Zamburiña en la Audiencia Provincial de Ourense.
El inspector del CNP, Antonio Rodríguez, durante el juicio por la operación Zamburiña en la Audiencia Provincial de Ourense. Brais Lorenzo

Antonio Rodríguez, el inspector del Grupo de Estupefacientes acusado, recuperó su puesto laboral tras la primera sentencia favorable y ahora reclama al juzgado de instrucción que active la investigación contra el jefe de asuntos internos que imputó a los funcionarios ourensanos

03 feb 2023 . Actualizado a las 15:48 h.

Definitivamente absuelto por la sentencia del Tribunal Supremo que ratifica la nulidad de las escuchas que sustentaron las acusaciones de corrupción policial en la comisaría de Ourense —la denominada operación Zamburiña— el inspector del CNP Antonio Rodríguez quiere que se impulse la querella que en su día presentó contra el jefe del grupo VI de asuntos internos que dirigió la investigación. El funcionario, rehabilitado en marzo del 2021 para su puesto en la comisaría ourensana tras la primera sentencia favorable de la Audiencia Provincial, considera que la reparación judicial ya no le sirve. «Hubiera sido importante para mis padres, que vivían en un pueblo y sufrieron los comentarios, pero los dos murieron el año pasado y ya no han visto esto», lamenta. El policía explica que reclamarán al juez de instrucción 2 de Ourense, Luis Doval, en el que recayó la querella, que active la causa. El inspector considera que ahora debe investigarse al mando por haber mentido para imputar a sus compañeros.

«Se creyó conjeturas, pero yo tenía copia de lo que había hecho. Mintió cuando decía que accedí fuera de mi turno a fichas de antecedenteso que hacía recorridos inverosímiles durante mi trabajo, pero no aportaba las actas o los partes de vigilancia. Yo lo documenté en instrucción, pero el juez no lo vio concluyente», explica sobre su defensa durante el caso que según ratifica el TS que tuvo una investigación deficiente de asuntos internos de la policía. Afirma que, cuando reciba la sentencia del alto tribunal, la aportará al juez Doval para que impulse la querella. El querellado, Sergio G., sigue en su puesto, a pesar de que, indica Rodríguez, le echaron abajo otra investigación de su grupo de asuntos internos en Andalucía.

Más que recuperar los ingresos económicos y las vacaciones que dejó de disfrutar durante la media docena de años que estuvo suspendido de su puesto de funcionario y que recuperará con la sentencia firme del Supremo, el inspector pretende que el mando de Madrid sea investigado por su responsabilidad en este caso. «La querella es contra él por haber firmado oficios inveraces. Ningún policía miente en sus atestados para imputar a delincuentes. Le atribuyo más responsabilidad a él que a los policías gemelos porque estos podían tener una enemistad conmigo, pero el de asuntos internos debería haber sido neutral si hubiera hecho bien su trabajo. Jugó con compañeros, pincharon los teléfonos de once policías por comentarios. Yo, para justificar solicitudes de pinchazos, tengo que presentar actas de incautaciones de drogas y hacer vigilancias. Estas fueron intervenciones telefónicas prospectivas, para ver si se cometía algún delito», explica.