La N-120 dejó de ser la carretera más peligrosa de Ourense al prohibir adelantamientos

m. rodríguez OURENSE

OURENSE CIUDAD

El accidente ocurrido en el kilómetro 562 de la N-120 se saldó con un fallecido en una colisión contra un camión el 26 de julio del 2016.
El accidente ocurrido en el kilómetro 562 de la N-120 se saldó con un fallecido en una colisión contra un camión el 26 de julio del 2016. xmr

La reforma de las intersecciones y carriles del vial mejorarán la seguridad

22 ene 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Después de años de parálisis, con el proyecto olvidado en un cajón, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) ha dado el visto bueno esta semana a la aprobación, provisional, de la reforma de la N-120, que prevé la instalación de carriles adicionales en seis kilómetros del vial, entre Nogueira de Ramuín, O Pereiro de Aguiar y Ourense, donde no estaba permitido adelantar. La medida ralentizaba el tráfico en un eje fundamental para la comunicación con Monforte de Lemos y la comarca de Valdeorras. La señalización con línea continua, la limitación de velocidad y su control mediante un radar fijo fueron medidas que tomaron la DGT y el Ministerio de Fomento para paliar la alta siniestralidad que, en los años anteriores, había sufrido el vial. La accidentabilidad se ha reducido en general en todas las vías y territorios a casi un tercio de los que producían en la primera década de los dos mil.

La N-120 fue escenario de trágicos accidentes en esa primera década del milenio. Uno de los más atroces fue el que costó la vida a los cuatro miembros de una misma familia, dos padres y dos hijos, una madrugada de abril del 2004, en Melias, a la altura del kilómetro 560,300. En aquel mes de abril morían ocho personas en las carreteras ourensanas. La carretera nacional Logroño-Vigo, a su paso por Ourense, solía aparecer con algunos de sus tramos como los más peligrosos de la Red de Carreteras del Estado. En los informes EuroRap de los clubes de automovilistas RACE y RACC, los puntos negros —contabilizados de diferente manera que la DGT— apuntaban a la N-120.

En el año 2004, cuatro miembros de una familia que viajaban en un turismo fallecieron en la N-120, en Melias, al chocar contra un camión.
En el año 2004, cuatro miembros de una familia que viajaban en un turismo fallecieron en la N-120, en Melias, al chocar contra un camión. PILI PROL

La Administración tomó medidas: prohibió los adelantamientos en el tramo con una línea continua pintada en el 2009 entre Os Peares y la ciudad de Ourense, instaló radares (pk. 550.72 y 542 en sentido creciente de los kilómetros) y se redujeron los límites de velocidad (de 100 a 90 kilómetros por hora, con carácter general para las vías de doble sentido) en el tramo en el que están previstas las obras.

Con esas limitaciones, los accidentes bajaron notablemente. En el año 2008, uno antes de esa reforma de la señalización, hubo dos accidentes mortales en ese tramo. En el kilómetro 557, una mujer moría en marzo al invadir el carril contrario y chocar contra un camión. En ese mismo siniestro resultaron heridas cuatro personas, de carácter leve. Unos meses más tarde, en octubre, pero solo tres kilómetros más adelante fallecía un hombre, en una colisión frontal contra otro camión.

En octubre del 2008, el tramo de la N-120 a su paso por O Pereiro de Aguiar fue el lugar de este accidente con  un muerto tras una colisión frontal de su turismo contra un camión.
En octubre del 2008, el tramo de la N-120 a su paso por O Pereiro de Aguiar fue el lugar de este accidente con un muerto tras una colisión frontal de su turismo contra un camión. PILI PROL

Al año siguiente, ya con la nueva señalización vigente, se producía solo un siniestro mortal en ese tramo, a causa de una salida de vía en O Pereiro de Aguiar. En los dos ejercicios siguientes, no hubo accidentes con muertos, aunque sí con heridos graves. Hasta el 2012 no volvieron a registrase choques mortales aunque en la primavera de ese año hubo dos muertos en el fatídico punto kilométrico 557. Al año siguiente, se computaron otras dos muertes en la carretera, con graves sucesos un poco más abajo, en el 561.

Los cambios en la vía sirvieron para bajar las cifras de siniestralidad. En todo el 2014, solo hubo un herido grave en la carretera y todo el tramo únicamente registró tres heridos leves en diferentes meses. Los dos siguientes años, en el tramo analizado, se certificaron dos muertes, una en el 2015 y otra en el 2016. Hubo cinco heridos, leves, en una colisión múltiple en el mes de mayo de ese año, en el kilómetro 564, ya en el término municipal de Ourense. Pasarían casi tres años, hasta marzo del 2019, sin nuevos accidentes mortales en ese trecho. No obstante, la situación de la carretera obligaría a intervenir de forma urgente a Fomento en abril del 2018, a causa de un gran desprendimiento en el kilómetro 551 que obligó a cortar la nacional y a desviar el tráfico con regulación semafórica. En el año 2019 se produjo el último accidente viario en el tramo en los últimos 15 años. Desde el 2007 al 2022 hubo en la zona analizada (entre los puntos kilométricos 548 y 568) un total de diez fallecidos.

En agosto del 2009, la carretera 120 se cobró la vida de un conductor en el kilómetro 560.
En agosto del 2009, la carretera 120 se cobró la vida de un conductor en el kilómetro 560. Santi M. Amil

La N-120 ya no está entre las principales preocupaciones de la DGT en cuanto a siniestralidad en ese tramo, ni tampoco figura entre los más peligrosos de los informes. La N-541, entre los puntos 23,5 y 33,6, presenta un índice de riesgo mayor, con cinco accidentes mortales o graves en el 2022, según el informe de EuroRap. La N-532 o la N-525 se sitúan por encima en este ránking de peligrosidad. El tramo de la N-120, según el estudio del RACC, tuvo 6 accidentes graves en el 2020 —los datos de la DGT indican dos heridos graves y dos leves— pero dada su intensidad media de vehículos cae en el listado de riesgo. Los tramos de la red viaria con calzada única y la presencia de intersecciones al mismo nivel son factores que influyen notablemente en la siniestralidad y en los que, precisamente, pretende actuar el Mitma para mejorar la seguridad vial del trazado. Está lejos del nivel de mejora que supondría la reclamada autovía A-76, pero al menos permitirá adelantar y girar sin ralentizar tanto el tráfico.

La carretera N-120, entre la capital y Os Peares, ganó en seguridad con la prohibición de adelantar en un tramo de once kilómetros, pero también en lentitud

La dictadura de la línea continua

Rubén Nóvoa

Tres zonas conflictivas donde ya no se puede adelantar. La serie de imágenes muestra tres puntos conflictivos de la N-120, entre Ourense y Os Peares, donde se ha establecido la prohibición de adelantar. En la imagen superior, se encuentra el kilómetro 560; en la intermedia, el cruce y cambio de sentido de Melias; y en la inferior, el kilómetro 554.

La carretera de Os Peares siempre ha estado en el punto de mira de la seguridad vial. El sinuoso trazado y la escasa visibilidad debido a la vegetación que crece a las riberas del río Miño durante los 17 kilómetros que dura el recorrido hacían que adelantar se convirtiera en una actuación de riesgo. Pese a esta situación, el Ministerio de Fomento había optado por habilitar diversas zonas de adelantamiento que daban lugar a arriesgadas maniobras con conductores jugándose el tipo entre camiones.

Seguir leyendo