Cinco restaurantes de barrio que no te puedes perder en Ourense

María Doallo Freire
María Doallo OURENSE

OURENSE CIUDAD

Un grupo de amigos disfruta de un cochinillo asado en O Lar do Leitón
Un grupo de amigos disfruta de un cochinillo asado en O Lar do Leitón MIGUEL VILLAR

No solo los locales del centro de la ciudad tienen propuestas culinarias atractivas y de calidad

22 oct 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

En Ourense es muy fácil comer bien porque hay excelente materia prima, buenos profesionales que la convierten en elaboraciones deliciosas y atractivas y una amplísima variedad de locales. Pero todo lo bueno que tiene la gastronomía en la ciudad no está solo en el centro o en el casco histórico, también está difuminado por los barrios. 

El equipo de Auriga
El equipo de Auriga MIGUEL VILLAR

En este sentido, una de las propuestas culinarias que más triunfan actualmente fuera del centro de Ourense es el restaurante Auriga, en O Polvorín, que abrió sus puertas hace tres años en un local a estrenar, de más de 360 metros cuadrados, en el bajo de un edificio de nueva construcción. En este negocio apuestan por el producto fresco y la cocina con toques modernos. «Cuidamos el sabor y nos gusta fusionarnos con otros tipos de cocinas del mundo. Nuestro menú del día es en forma de degustación. Con un aperitivo, dos primeros, un segundo a escoger entre varias opciones de carne y pescado y un postre. Todo por 12,90 euros», explica Cristian Arrojo, gerente de Auriga. Además, trabajan con una carta de picoteo desenfadado, al estilo gastrobar, y con otra con platos más tipo restaurante. Entre sus especialidades está el tartar de bonito de Burela, la costilla de cerdo selecta con salsa teriyaki de mango o la chuleta de vaca madurada. «Cambiamos la carta cada poco para aprovechar los productos de temporada», comenta Cristian. Y destaca: «Estamos a doce minutos del centro caminando y contamos con un espacio único, con dos terrazas enormes y muchísima tranquilidad. Hemos creado un espacio aparte, aquí siempre hay donde aparcar. Hasta vienen hosteleros a comer y desconectar. Estamos encantados con el barrio». Cierra los lunes. 

El equipo del Vila Real, con parte de su producto fresco del día
El equipo del Vila Real, con parte de su producto fresco del día Santi M. Amil

En O Couto está el Vila Real donde su propietaria, Natalia Núñez, lleva trabajando 25 años. Este restaurante está especializado en pescado de la ría, arroces y carne gallega. «Tenemos desde terneras supremas a cerdo ibérico de bellota. Pero también cordero lechal y luego pescado según el del día, desde dorada a coruxo o San Martiño», cuenta Natalia. De su carta destaca también las opciones de pato que propone. «Hacemos foie fresco a la plancha con peras al vino y también muslo de pato al confit», explica la empresaria y cocinera ourensana. Todos los postres de este restaurante, que destaca por la tradición y el producto de calidad, son caseros. Su equipo descansa los lunes. «Al final vivimos mucho de la gente del barrio. Tenemos muy buen producto y eso se nota y lo saben también los vecinos de otros puntos de Ourense, que vienen a menudo a comer aquí», concluye Natalia. 

Carlos presenta el cochinillo de O Lar do Leitón
Carlos presenta el cochinillo de O Lar do Leitón MIGUEL VILLAR

O Lar do Leitón lleva quince años cocinando asados en As Eiroás. «Somos muy conocidos por nuestro cochinillo», apunta Carlos Crespo, propietario del negocio familiar. «Mis padres escogieron esta zona para construir una casa con un local en el bajo donde abrir un restaurante y la verdad es que estamos encantados con la gente», añade. «Lo que ofrecemos está casi obsoleto. Es comida tradicional, de cocción lenta y de disfrute tranquilo, por eso a nuestros clientes les es igual venir hasta aquí, porque luego se quedan horas en casa», continúa Carlos. De sus cocinas salen chuletas de vaca madurada y también bandejas de cocido, dependiendo de la temporada. También preparan lamprea y, por encargo, tienen carne de buey Angus y Wagyu. Y otra de sus peculiaridades es que tienen una de las cartas de aguas más amplias del mundo. Actualmente supera las 160 referencias. «Nos visita gente de todas partes, incluso de México, de Suiza o de Estados Unidos. Un poco atraídos por el agua, pero luego se sienten a gusto por la propuesta gastronómica también», termina el ourensano. O Lar do Leitón cierra los martes.

Paco Gómez, en A Feira
Paco Gómez, en A Feira Santi M. Amil

Hace nueve años que Paco Gómez abrió el restaurante A Feira en A Ponte, con la intención de crear tendencia en carnes y pulpo á feira. Este carballiñés de Arcos, cuarta generación de una familia de pulpeiros, escogió el barrio pontino sin dudarlo. «Por el espacio. Aquí encontramos un local que cumplía con todas nuestras expectativas y a día de hoy estamos encantados. Los vecinos son estupendos y tenemos un gran porcentaje de turistas entre nuestros clientes, incluso notamos la llegada del AVE», afirma. Dan chuletones, solomillos y también propuestas de pescados y arroces caldosos. «Tenemos platos veganos y también alguna que otra innovación con elaboración internacional como un tartar, un carpaccio...», admite Paco. El local abre todos los días de la semana y cuenta con una amplia terraza, perfecta para celebraciones. 

Postres y comida casera en A Antiga Leitería
Postres y comida casera en A Antiga Leitería Santi M. Amil

También en A Ponte está el mesón A Antiga Leitería, que regenta Pablo Otero. Abrió en el 2013 y en el 2017 experimentó una reforma completa. «Creo que nos definiría como un restaurante de carnes en general, no solo a la brasa, porque las hacemos de todas las maneras: en el cocido gallego, en los cachopos y también tenemos chuletas de vaca madurada», afirma Pablo. Tienen bacalao, croquetas y otras muchas propuestas tradicionales. «Escogí A Ponte por este local y no me equivoqué. Mi percepción es que la gente se mueve para comer», añade el propietario del restaurante, que cierra los domingos. «Aunque no vivimos solo con las visitas de los vecinos de la zona, nos hace mucha ilusión que vengan, y también abrimos nuestras puertas a todo el mundo. Creo que somos un restaurante de ocasiones, para un homenaje, para celebrar...», dice. Aunque también tienen opciones para comer a diario. «Quiero que la gente nos elija porque se come bien», termina Pablo.