Amencer cierra su verano tras diez jornadas llenas de actividades
12 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.El Campamento Urbano de Ourense dice adiós a otro mes de agosto cargado de sorpresas. Bajo un cañón de espuma y con música de fondo, los niños y monitores de las actividades disfrutaron del acto más esperado del día da despedida. Las ganas de divertirse se veían en las enormes sonrisas dibujadas en las caras de los pequeños, pero también de los no tan pequeños. Un año más, Amencer consiguió hacer de las primeras semanas del mes de agosto de más de medio millar de niños, unas de las más divertidas del verano.
Tras diez días llenos de actividades, jornadas temáticas, excursiones y noches de risas para los más mayores, llegó el momento de despedirse. Durante la mañana, todos los inscritos del campamento pudieron divertirse en algunas de las discotecas de la ciudad de Ourense, en las que la música y las luces fueron las protagonistas de la sesión matinal. A las 12.15 horas llegó el momento más esperado: la fiesta de la espuma. Cientos de niños y animadores se llenaron de pies a cabeza de espuma no tóxica lanzada desde un cañón gracias a los bomberos de la ciudad, que más tarde los mojarían a todos con una manguera.
La velada no acabó ahí, sino que los inscritos pudieron disfrutar de su comida al aire libre en las instalaciones del colegio Salesianos, con una sobremesa por cortesía de diferentes pastelerías ourensanas. El cierre final de la edición número treinta y cinco del campamento urbano llegó con las diferentes actuaciones creadas por los niños de las actividades. También se repartieron los diplomas a todos ellos, junto con los premios «urbanitos» por categorías grupales. La foto de todos los niños y monitores fue el broche a otro verano de risas, otro verano con el Campamento Urbano de Ourense.