En aquel momento se oficializó una renuncia que llevaba ya varios meses anunciada y que el partido justificó en una estrategia para reforzar a su sustituto colocándolo al frente de la alcaldía meses antes de la cita electoral. Sin embargo, la marcha de Manuel Cabezas comenzó a gestarse dos años antes, en 2005, cuando la oposición (entonces PSOE y BNG) pedían reiteradamente que aclarase su patrimonio tras una serie de publicaciones sobre la construcción de su casa en las que se ponía en duda la procedencia de materiales e incluso árboles que se ubicaban en la finca. Cabezas negó que se hubiese apropiado de bienes públicos y llevó al pleno del 23 de septiembre del 2005 documentación (incluidas las declaraciones de Renta y Patrimonio) para que fuese revisada por la oposición. A pesar de que oficialmente el partido le mostraba su apoyo (el entonces presidente provincial, José Luis Baltar, lo hizo reiteradamente), Manuel Cabezas anunció pocos días después que no se veía encabezando la siguiente lista popular.
Doce años al frente de la alcaldía dan para mucho y a pesar de los casi tres lustros que lleva apartado de la vida municipal, Cabezas sigue siendo uno de los políticos más conocidos, tal y como reflejó la encuesta realizada por Sondaxe, publicada por La Voz el pasado 29 de mayo. El exalcalde aparecía como el segundo mejor valorado, con 4,72 puntos, justo por detrás de Pepe Araújo, actual portavoz de Ciudadanos y quien, por cierto, también formó parte de sus equipos de gobierno.