La industria de Ourense continúa frenada por la huelga del transporte: «O seguinte serán os despedimentos»
OURENSE CIUDAD
Pequeña tregua de los piquetes en las diferentes áreas industriales de Ourense
22 mar 2022 . Actualizado a las 09:31 h.Al octavo día de la huelga del transporte en Ourense, convocada por un sindicato minoritario a nivel nacional y que en la provincia secunda la asociación Apetamcor, los piquetes levantaron ligeramente el pie del acelerador. La tradicional imagen de transportistas en la entrada y salida de las áreas industriales de Ourense para evitar el movimiento de vehículos pesados dio paso este lunes a unas rotondas libres de piquetes y donde la Guardia Civil hacía acto de presencia en una jornada que calificaron de «tranquila». La misma percepción tuvieron en la asociación de empresarios del polígono de San Cibrao das Viñas, que entiende que este escenario de relativa tranquilidad tiene que ver con las negociaciones abiertas por el Gobierno central con los sindicatos que sí que tienen representación en el Comité Nacional de Transporte por Carretera (CNTC). Las mismas fuentes indican, sin embargo, que salvo que haya un acuerdo que desbloquee el conflicto, los piquetes regresarán al principal polígono ourensano.
La división en el sector complica las negociaciones para desbloquear el conflicto. Los convocantes del paro que tiene en jaque a la industria y al agro —la Plataforma para la Defensa del Sector del Transporte de Mercancías es quien convoca el paro —no tiene representación en esa mesa de negociación y, por tanto, mantienen la presión. La situación de Apetamcor es distinta. La asociación gallega, que tiene su sede central en el polígono de San Cibrao das Viñas, cuenta con más de medio millar de afiliados en la provincia y sí que está representada, toda vez que forma parte de la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (Fenadismer). Su presidente José Manuel Rodríguez aseguraba este lunes que estaban pendientes de las negociaciones, aunque lamentaba que en esa reunión no estuvieran todos los actores en conflicto.
A la espera de avances, la industria continúa con el freno de mano echado, pese a que este lunes sí que se vieron algunos camiones en ruta por sus viales. Uno de los lugares donde más se observa la falta de actividad es en la Cidade do Transporte. Las empresas de este sector ubicadas en sus parcelas se dividen entre las que directamente han optado por cerrar la persiana al no poder realizar sus desplazamientos y las que mantienen una actividad mínima. En esos terrenos se encuentra la nueva nave central del grupo Cuevas. En los 22 muelles de carga de la firma ourensana la actividad este lunes era mínima.
En el polígono Barreiros la imagen era similar. «A cousa estase pondo moi tensa. A nós todos os luns chéganos un camión con material para subministrar a nosa produción e, outra vez, non tivemos noticias», explica Alejandro Cruz, propietario de Lacados Miño y presidente de la asociación de empresarios del polígono Barreiros.
En su caso, al igual que en el de la mayoría de empresas del tejido empresarial ourensano, se opta por capear el temporal aunque entienden que la situación es insostenible. «Se non hai unha solución pronto, teremos que tomar medidas. Estamos mandando á xente de vacacións, pero o seguinte paso será un ERTE ou despedimentos», lamenta.
Tampoco hubo piquetes ayer en la comarca de Valdeorras, donde su presencia ya fue anecdótica la semana pasada. En la comarca el sector está parado y no se mueve un camión de pizarra. Y así seguirá, según lo acordado en la asamblea de la asociación de transportistas del Bierzo y Valdeorras. Mantienen el paro mientras no haya una solución para los disparados precios del combustible.
Los supermercados esquivan el desabastecimiento tirando de las reservas de almacén
«Sobrevivimos con proveedores externos pero lo que es de nuestra propia marca no nos está llegando», aseguran en un supermercado
La huelga de transportistas continúa y eso repercute directamente sobre el abastecimiento de distintas tiendas y establecimientos. El miedo a quedarse sin existencias de frescos hizo que en la mayoría de supermercados optasen por ser precavidos. Las tiendas ourensanas hicieron pedidos más grandes de lo habitual, días antes de que comenzasen las quejas. De esta forma pudieron guardar en almacén y en cámaras y estar preparados ante la posible escasez de determinados productos. De manera general, la imagen que más se repite en los súper de la ciudad es la de neveras vacías donde deberían estar el pollo y sus derivados. Estos son los alimentos que más están fallando. En Froiz se terminaron las existencias este lunes y no había reposición, mientras en Aquié quedaban todavía algunos productos elaborados con pollo y en Gadis había piezas enteras frescas, listas para cocinar o congelar. Sin embargo, este establecimiento iniciaba la semana con muy poca oferta de frutas y verduras. En Froiz, la estantería que estaba más vacía era de la leche. «Sobrevivimos con proveedores externos pero lo que es de nuestra propia marca no nos está llegando», afirma el personal de Froiz.
La clientela está a la expectativa. «Fui el sábado a hacer la compra grande y hoy vengo a coger las cosas que me faltaron porque no había en ese momento, como la fruta y la lechuga envasada ya preparada. Por el momento no me preocupa porque podemos adaptarnos. Si no se come una cosa o de una marca, pues se come de otra y listo», comenta la ourensana Eugenia López.