Una premonición que se cumple con el paso de las carreras
Óscar Gayoso recuerda que su hijo Miguel debutó con 14 años recién cumplidos en el Campeonato de España de Car Cross. Fue último en esa primera carrera en Mollerusa: «Se acercó a mí José Lombardía, preparador bien conocido en el nacional y me dijo que Miguel lo hacía muy bien. Yo le pregunté si se estaba riendo de mí e intentó tranquilizarme, diciéndome que hablaríamos más adelante. Meses después volvió a acercarse insistiendo en que el chico iba bastante bien».
El joven Gayoso reconoce que el cambio le ha sentado perfecto y parece de acuerdo con el camino que señalaba su padre: «Me gustaba mucho el karting, pero aquí disfruto al máximo de un vehículo con amortiguaciones, más potencia y con los derrapes sobre la tierra», asegura este piloto al que le gustaría seguir los pasos de deportistas como «Iván Ares, es un ejemplo para mí y espero que pueda tener oportunidades en una Copa de Promoción». Antes falta otra campaña en el CEAX, en el que Daniel será compañero de equipo: «Ya sé cuál es el ambiente y como son los pilotos. Será una buena forma de empezar en este mundillo».