La Policía Local gestiona un hotel para alojar dos días a una familia desahuciada

m. R. OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

Vehículo de la Policía Local de Ourense en el centro de la ciudad
Vehículo de la Policía Local de Ourense en el centro de la ciudad Miguel Villar

Los inquilinos se resistían a desalojar el piso aunque había un lanzamiento ordenado por el juzgado por el impago del alquiler desde hace un año

18 dic 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

La Policía Local de Ourense realizó una mediación para lograr que un inquilino que iba a ser desahuciado por impago de alquiler— y que se resistía a la ejecución del desalojo ordenado por el juzgado encerrándose en la casa— abandonase la vivienda voluntariamente. José María García Azevedo, el desahuciado, apuntó que había decidido quedarse en el interior del piso, situado en la calle Castro Canseco de la ciudad, porque solo pedía estar unos días más hasta firmar, el lunes según dijo, un nuevo contrato de alquiler con la ayuda de Cáritas. «Nos quieren echar; solo le pido al dueño dos días y dice que es la ley. Estuve pagando el alquiler hasta que el propietario dejó sin hacer una reforma en el piso. Luego me quedé sin trabajo y sin nómina no te alquila nadie. Conseguimos la ayuda de Cáritas, que nos paga la fianza y un mes de alquiler, pero ese contrato se firma el lunes», explicaba el afectado, que apelaba a que tiene mujer y una niña pequeña para pedir esta prórroga. Desde la Policía Local hicieron gestiones para lograr que la familia pudiese quedarse durante el fin de semana en un hotel con pensión completa y se les ofreció hacer un inventario de sus enseres para garantizar que podrían recuperar todo y trasladarlo a su nuevo domicilio a partir del lunes. La situación se volvió tensa por momentos, pues el inquilino había trancado la puerta con un sofá y se negaba a salir; luego apareció su mujer con la hija de ambos de corta edad, reclamando poder entrar para coger alimentos para el bebé. La Policía Local le bajó lo que requería, mientras la informaba de la alternativa habitacional que tenían.

Realmente, la arrendataria del piso y la demandada por impago es su madre, Janet Azevedo. El inquilino reconoce que llevaba un año sin pagar y que la notificación del lanzamiento llegó en junio. En representación del demandante y con la providencia del Juzgado de Primera Instancia número 5 de Ourense que ordenaba que el desalojo se ejecutase en la jornada de ayer estaba la procuradora del arrendador. Según explicó el abogado de este, era la cuarta vez que intentaba ejecutar el lanzamiento y que los demandados no han llegado a acreditar que se encuentren en situación de necesidad, porque no se han presentado a llevar la documentación que les requerían en los servicios sociales municipales. Sobre la prórroga de unos días para irse a otro piso, esta parte aduce que ya argumentaron eso en otras ocasiones. Finalmente, casi tres horas después, el inquilino salió.