Alejandro Fernández Rivera: «Ganar la carrera del San Martiño da mucho caché»
OURENSE CIUDAD
El atleta ourensano intentará en enero bajar de los 29 minutos en una prueba de 10 kilómetros en Valencia
16 nov 2021 . Actualizado a las 16:07 h.Disfrutando todavía de las felicitaciones y de la satisfacción de haber ganado,por sexta vez, la carrera popular del San Martiño, Alejandro Fernández (Ourense, 1985) planifica ya nuevos retos, a la vez que atiende su trabajo diario en la tienda deportiva Run Maniak. La marca que consiguió este domingo en los 10 kilómetros por las calles de Ourense, 29.33, en un recorrido con cuestas le anima a prepararse para bajar el crono en su distancia fetiche por debajo de los 29 minutos. Tiene decidido intentarlo en la carrera de 10K que habrá en Valencia el 9 de enero.
—¿Contento con la marca personal que hizo en esta San Martiño? ¿Qué objetivos se pone a partir de ahora?
—La marca fue buena pero el circuito sigue siendo duro, no se pueden realizar marcas espectaculares. Por eso, en enero, me voy a Valencia donde, con un circuito llano, sí que se puede correr a ritmos altos sin estar pendientes de las cuestas o giros que te frenen. Un mes y medio después, tengo otro gran objetivo, que es el Campeonato de España de media maratón, que es también en Valencia, en Paterna, y ahí están en juego las medallas. Tengo aún una espina clavada con la media maratón y buscaré en los próximos años dar el 100% para quedarme satisfecho. Entre medias, hasta enero, correré las llamadas carreras comerciales que tienen dotaciones de premios económicos y que sirven de preparación para los objetivos fundamentales.
—¿Alterna carreras que proporcionan ingresos con objetivos deportivos?
—Sí, campeonatos oficiales y también carreras, como la de Valencia, en las que conseguir una buena marca que sirva como escaparate para atraer a patrocinadores o clubes interesados. El récord de España de 10K de Toni Abadía es muy duro, son 27.48. El objetivo de cara a Valencia es bajar de los 29, algo más de medio minuto menos de lo que hice en la San Martiño. Entrenando un poco más duro y quitándome del medio esas cuestas se puede llegar a rebajar.
—En la San Martiño, después del fuerte inicio de carrera con Kalkidan Gezahegne ¿pensaba que podría bajar ese tiempo?
—La chica bareiní llevaba una liebre, Reyes Estévez, que iba marcando ritmos para que ella pudiera batir su récord del mundo, pero era muy complicado, en este circuito es muy duro. Hacer un récord del mundo aquí era prácticamente imposible. Cuando se apartó la liebre oficial, en el kilómetro 3-3,5 aproximadamente, para que la carrera no se durmiera decidí asumir yo el peso de la prueba y seguir manteniendo un ritmo bastante alto que me permitiera ir desgastando a mis rivales. El portugués Nuno Costa se quedó en el kilómetro cuatro y la chica de Baréin aguantó hasta el 6,5 o 7. Luego seguí hasta meta con ese ritmo alto para que no me pudieran dar caza desde atrás.
—¿El recorrido de la San Martiño debe seguir siendo el mismo?
—La San Martiño es una carrera con un circuito emblemático, pasas por muchas zonas de la ciudad y tiene que seguir siendo así porque es representativo. No se tiene que tocar. La gente viene sabiendo que se va a enfrentar a un circuito que no es durísimo, porque los hay más duros, pero es de dificultad media-alta. Ya sabes que para hacer marca hay carreras más propicias. La San Martiño, si la ganas, da mucho caché.
—La carrera tuvo el foco en la presencia de la plusmarquista femenina. ¿Le gustó así o prefiere otro modelo de carrera?
—La verdad es que me hizo ilusión correr con una chica subcampeona olímpica y que tiene el récord del mundo de 10 kilómetros de mujeres. Pero, independientemente de eso, mi objetivo era ganar la carrera, me daba igual ganarle a un hombre, a una mujer o a un extraterrestre. No gasté energía en pensar en eso. Correr con ella, con el pedigrí y currículo que tiene, me hizo ilusión, hacerme fotos y hablar con ella después. Son gente que te sirve de referencia. Era maja y habló con todo el mundo, pero además compitió de diez, batió el récord de la prueba femenina por muchísimo y hasta el kilómetro 6 fuimos en ritmos de récord del mundo. Fue un carrerón.
—¿Aquí entrena en grupo?
—Tengo un grupo de entre tres y siete personas para entrenar. Me arropan día a día, les tengo mucho cariño y me ayudan un montón. Sin ellos no sería posible.