«Tuve que ubicarme bien en el mapa para encontrar Ourense»

OURENSE CIUDAD

Agos Iglesias

Franco Pennacchiott antepuso su carrera de Economía antes de cruzar el Atlántico para jugar al baloncesto en el COB

09 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Hay un nuevo pívot en la ciudad. Uno de esos espigados jugadores de baloncesto que llama la atención en las calles de Ourense, donde el argentino Franco Pennacchiotti (Bahía Blanca, 1990) intenta aclimatarse a un ritmo de vida muy distinto al que llevaba en el cono sur. Y también a una rutina de trabajo muy distinta a la que estaba acostumbrado en el deporte sudamericano. Por eso, este economista en ciernes piensa en celebrar éxitos inmediatos en su nueva escuadra.

-¿Le está costando mucho adaptarse a Europa?

-La verdad es que no, aunque me hubiera gustado jugar más partidos y prácticas con los nuevos compañeros, pero un esguince de tobillo me frenó. Tengo muchas ganas de debutar, pero serán los especialistas los que decidan. La temporada es larga y es mejor curar la lección bien curada, antes de forzar.

-¿Tuvo que buscar Ourense en el mapa?

-Aunque sabía bien dónde estaba Galicia, sí tuve que ubicarme bien en el mapa para encontrar Ourense. Sabía que me iba a gustar mucho y, desde que llegué a Vigo al aeropuerto, no dejé de fijarme en estos paisajes, son hermosos. Sobre todo me llaman la atención las montañas y el verde, porque yo vengo de una gran llanura. En cuanto llegué a la ciudad, también me encontré muy cómodo, todos en el club me están ayudando mucho, dentro y fuera de la cancha.

-¿Y la comida?

-Tengo suerte, de la gastronomía gallega me gusta todo, del jamón a la tortilla de patatas y más cosas que he probado. Salí a cenar con los compañeros y fue todo excelente. Ya tengo ganas de seguir probando.

-Llama la atención que fuera elegido jugador revelación de la máxima categoría argentina, después de los treinta.

-Es que hasta ese momento prioricé mis estudios de Economía y solo jugué en equipos de mi ciudad. En Bahía Blanca hay mucha tradición de baloncesto y participé en otras competiciones menores, porque no quería dedicarle el tiempo que requiere a la Liga Nacional. Cuando acabé con todas las clases presenciales, aunque me falta algún examen, pensé en salir y tuve una ocasión de jugar en Italia, en la Serie C, pero la pandemia dejaba muchas dudas y acepté la oferta de Peñarol de Mar del Plata, la verdad es que la temporada no salió mal.

-¿Y cuándo surgió la oportunidad del COB?

-Fue lo mejor, siempre ha sido mi objetivo. Sabía que en España tienen el mejor desarrollo de jugadores en Europa y poder competir aquí era un sueño para mí. Y se está cumpliendo todo lo que esperaba, porque la forma que tienen de entrenar acá no tiene que hablar con la de Argentina. Son entrenamientos más específicos y cada cual trabaja sobre el rol que va a tener en el equipo.

-¿Ya habló con Armando Gómez sobre el rol que va a tener en el equipo cobista?

-Tanto Darius Carter como yo vamos a tener un rol de pívots dinámicos y atléticos, porque tenemos que ayudar por dentro a un plantel que tiene gol desde el perímetro, ya estamos viendo que son capaces de anotar muchos puntos.

-¿Se ve capacitado para cumplir con esas expectativas?

-Creo que sí, siempre he sido esa clase de pívot dinámico que ellos buscaban, nunca fui de esos jugadores pesados que tienen poca movilidad. Fue una pena que el esguince me cortara el trabajo de preparación, pero estoy aprendiéndome los sistemas y conociendo a los compañeros y entrenadores para rendir al máximo en cuanto esté disponible. Ya viajé con ellos al partido de Portugal y también estuve presente en el amistoso que jugamos en nuestra cancha.

-¿Le sorprendió el ambiente del Pazo Paco Paz o era lo que se imaginaba antes de viajar a España?

-Es espectacular, estoy deseando jugar delante de esta afición, porque es maravilloso estar en un equipo que quiere estar arriba en cualquier competición. Aquí se nota en todo lo que rodea al club que quieren estar arriba y eso te predispone para lo mejor.