«Hay muchos agujeros», se quejan los usuarios de autocaravanas en Ourense

LÚA RODRÍGUEZ / R. N. P. / MIGUEL ASCÓN OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

Caravanas aparcadas en la zona termal
Caravanas aparcadas en la zona termal Íñigo Rolán

La oposición censura las críticas de Jácome y pide reactivar el proyecto de reforma del cámping de Untes

01 sep 2021 . Actualizado a las 11:33 h.

El auge en el turismo de caravanas es evidente, sobre todo este verano. Con la pandemia del coronavirus, el turismo nacional ha crecido notablemente y muchas personas han preferido pasar sus vacaciones en este tipo de vehículos. La provincia también ha recibido a decenas de autocaravanistas en estos meses de verano, aunque por Ourense suelen pasar en todas las épocas del año para ir a las termas.

Los usuarios cuentan con webs especializadas en recomendaciones de áreas de descanso y parkings para caravanas. Este tipo de páginas les permiten conocer también las opiniones de otras personas. A través de AreasAc, los autocaravanistas dejan sus valoraciones de forma anónima sobre los servicios o el estado de estos espacios habilitados.

En el caso de la provincia de Ourense, hay referenciadas 27 áreas de descanso para autocaravanas. La mayoría apenas reciben críticas y son valoradas positivamente. En el caso de Ribadavia, los usuarios resaltan su cercanía al pueblo, su cuidado y su mantenimiento, aunque se quejan de la inclinación que hay en el terreno. Otros, como el de Entrimo o el de Leiro, también son los más recomendados por «sus perfectas condiciones» y por las zonas de servicio y parking que ofrecen.

En la ciudad de Ourense no hay ninguna área para las autocaravanas y eso también se nota en la opinión de los ususarios, que también mostraron su malestar en declaraciones a La Voz por las críticas del alcalde. Aun así, estacionan en las zonas termales de Outariz, O Tinteiro o A Chavasqueira. Estos lugares no ofrecen ningún servicio específico para ellos y esto es un problema para los usuarios, que lo hacen notar a través de los portales de Internet. Junto a las termas de Outariz, es el sitio preferido por los autocaravanistas para pernoctar, aunque recibe una gran cantidad de críticas. Los usuarios de AreasAc están molestos por el desnivel, la falta de servicios, la poca sombra o la lejanía. También consideran que está abandonado y poco cuidado. Aun así, hay quienes resaltan lo bueno del lugar como la parada de autobús urbano que hay en el propio aparcamiento. Otro estacionamiento favorito de la ciudad es el que se encuentra situado en el paseo do Tinteiro. En Park4niht, otra web especializada en áreas de descanso y estacionamientos, los usuarios cuentan sus buenas experiencias en el lugar y lo recomiendan a otros usuarios. «Buen sitio para pasar la noche», comentaba Noelia Alijo el pasado 23 de julio. La tranquilidad del lugar o su mantenimiento son algunas de las característias que resaltan los usuarios. «Para visitar la ciudad hay que coger transporte público, pero merece la pena parar aquí. Es recomendable 100 %», destacaba Eva Ochoa la semana pasada.

 Google también ofrece la posibilidad de hacer reseñas sobre los lugares donde se puede aparcar y pernoctar en Ourense. Los usuarios son críticos con el mantenimiento de estos sitios y critican la falta de interés por parte del Concello. Jorge Rodríguez Frías destacó hace unos meses la tranquilidad de la zona de las termas de Outariz y lo recomendó al resto de usuarios para pernoctar con la caravana. Bea Marín también mencionó los servicios que ofrece este lugar. «Hay papeleras, contenedores e iluminacion, pero sin servicio de vaciado y llenado de aguas», explicó. Sin embargo, algunos usuarios se quejan del pavimento del lugar y del escaso mantenimiento. «Hay muchos agujeros», cometó David Azanza esta misma semana. Reza también es frecuentado por este tipo de turismo, aunque no está habilitado para ellos. Las opiniones que tienen sobre el lugar, en su mayoría, son negativas. Piden una mayor impicación del concello en la limpieza y conservación del lugar. «Necesita mantenimiento urgente», pedía Isabel Martinez. La mayoría de usuarios reclaman una área habilitada para los autocaravanistas.

La oposición defiende en bloque a los caravanistas frente a las críticas de Jácome

La publicación en redes sociales de Gonzalo Pérez Jácome con críticas al turismo de autocaravanas no deja de provocar reacciones. Todos los grupos de la oposición han coincidido en censurar las declaraciones del regidor y, según dicen, ese tipo de turistas sí son bienvenidos en Ourense. «A cidade non está como para desprezar a ninguén», dice el portavoz del PSOE, Rafael Rodríguez Villarino, que defiende que los autocaravanistas «son tamén unha fonte de ingresos». Apunta, además, que una pequeña inversión para dotar las infraestructuras necesarias «compensaría sobradamente» la presencia de este tipo de visitantes en la ciudad.

El portavoz del BNG, Luis Seara, insiste en la misma idea: «Os autocaravanistas achegan beneficios económicos aos municipios xa que acoden aos restaurantes dos pobos nos que acampan, repostan nas gasolineiras das zonas próximas e compran nos pequenos comercios». El nacionalista cree que el alcalde, «en vez de insultar e facer unha publicidade negativa do concello debe traballar para ter unha área para as autocaravanas».

Seara se pregunta qué fue del proyecto para la reforma del cámping de Untes, al igual que José Araújo, de Ciudadanos. «DO e o PP empeñáronse en arruinar Ourense e van camiño de conseguilo», dice el líder del partido naranja, que cree que Jácome criticó a los autocaravanistas simplemente «para chamar a atención».

La reforma del cámping de Untes sigue en un cajón: «Es una pena»

El arquitecto Alberto de Paula urge ejecutar el proyecto del año 2018

Cuando, en el año 2018, se presentó un proyecto para su reforma, el cámping municipal de Untes acumulaba un importante deterioro tras varios años cerrado por problemas con la empresa a la que se había contratado su gestión. Ese documento sigue en un cajón del Concello de Ourense mientras las instalaciones han seguido deteriorándose por el paso del tiempo y también a causa de ataques vandálicos, robos y okupas.

«Es una pena no poder aprovechar un espacio como el que tenemos allí, en una zona emblemática, a orillas del Miño, con unas vistas fantásticas. Es un sitio ideal», resume Alberto de Paula, que elaboró el proyecto de reforma junto a Aurelio Outeiriño. Según explica, en su día se planteó la posibilidad de acompasar esas obras con otras para conectar el cámping y el núcleo de población de Untes a la red de saneamiento de aguas. La instalación turística podría funcionar con la fosa séptica de la que dispone actualmente, pero se consideró oportuno aprovechar para solventar el problema existente en la zona con el tratamiento de las aguas residuales.

«Glamping» y caravanas

De Paula explica que le pareció una buena idea, pero lamenta que no hayan conocido más noticias al respecto. «En otros ayuntamientos seguro que no, pero en Ourense desgraciadamente sí es normal que este tipo de cosas tarden tres años o más». Sobre este asunto ya se manifestó esta semana la concejala de Turismo del gobierno municipal, la popular Flora Moure, que explicó que ese añadido en el proyecto es responsabilidad del área de Infraestructuras, en manos del alcalde, Gonzalo Pérez Jácome. La edila también censuró las críticas del regidor a los autocaravanistas, a quienes acusó de incumplir normas, generar molestias y no dejar beneficios en la ciudad.

«No podemos despreciar a ningún tipo de turista ni pretender que vengan solo los que tienen el último modelo de Maserati», opina también el arquitecto Alberto de Paula, que recuerda que el proyecto de reforma del cámping de Untes preveía una zona para autocaravanas. «Lo que nos pidieron era hacer un cámping versátil», explica el autor del proyecto, que se muestra especialmente satisfecho con el respeto al paisaje de la solución propuesta.

La reforma prevista —sin tener en cuenta la inversión necesaria para las obras de saneamiento citadas— tendría un coste de 826.341,59 euros. El diseño preveía 34 parcelas de 72 metros cuadrados cada una (pese a que el mínimo que impone la normativa es de sesenta) y la mayoría podrían acoger tiendas de campaña pero también caravanas y autocaravanas. Todas tendrían electricidad, agua y conexión wifi y la propuesta estrella era una zona con el concepto «glamping», es decir, «cámping con glamur». Se eliminarían los bungalós, sin encaje en la normativa urbanística actual, y se sustituirían por una especie de tiendas de madera con cama, sábanas y todo tipo de comodidades.