El coche que analiza la Policía, y que lleva 14 años aparcado en comisaría de Ourense, es el de uno de los asesinados en Burgos

Marta Vázquez Fernández
Marta Vázquez OURENSE

OURENSE CIUDAD

Agos Iglesias

El vehículo, que fue de Salvador Barrio y más tarde utilizó Rodrigo, su hijo, está siendo examinado por efectivos de la Policía Científica de la Brigada Central de Policía Judicial de Madrid

14 dic 2021 . Actualizado a las 15:38 h.

En la explanada de la comisaría de Policía de Ourense se custodia desde hace más de diez años el coche que perteneció a Salvador Barrio, el vecino de Burgos que en junio del 2004 fue brutalmente asesinado junto a su esposa, la ourensana Julia dos Ramos, y a su hijo de doce años. El vehículo, un Audi A6 de color blanco y matrícula de Burgos, fue incautado como prueba en 2007, cuando Rodrigo, el hijo mayor de la familia, fue detenido como sospechoso del triple crimen. Era el vehículo que conducía entonces el chico.

Pese a que los indicios que los investigadores de la comisaría de Policía de Burgos tenían contra el único superviviente de la familia, no pudieron sostenerse y Rodrigo Barrio, que entonces tenía diecinueve años, fue liberado apenas tres días después del arresto, su coche quedó custodiado como prueba, porque pese al tiempo transcurrido la investigación del terrible suceso nunca se ha cerrado.

Agos Iglesias

Ahora, diecisiete años después del crimen, los investigadores intentan aclarar quién fue la persona que mató a cuchilladas y con gran ensañamiento a las tres víctimas tras irrumpir en la casa familiar de la capital burgalesa de madrugada. Y para ello, agentes de Policía Científica de la UDEV central se han trasladado desde Madrid hasta la comisaría de Ourense para realizar una inspección en aquel Audi A6. Buscan restos biológicos que puedan incriminar a Rodrigo o a otro sospechoso, un vecino de la familia que fue detenido por hacer pintadas insultantes en la tumba de Salvador. Este último, Ángel R. P.,un burgalés que se encuentra en prisión cumpliendo condena por el asesinato de una mujer en Bureba y, por razones que por ahora no han trascendido, los agentes creen que el vehículo, que ha estado estacionado a la intemperie todo este tiempo, pudiera tener algo sobre lo que trabajar en aras de aclarar el suceso.

Eso sí, antes de introducir el coche en el interior de la comisaría, donde se pretendía examinar el interior del habitáculo, ha sido necesario hacerle algunas pequeñas reparaciones, como insuflar aire en una de las ruedas delanteras, para que pudiera ser deslizado a una grúa. Posteriormente, el vehículo ha sido introducido en el interior del estacionamiento policial. 

Agos Iglesias

Precisamente, las llaves de ese Audi A6 habían sido en su día una de las pruebas contra Rodrigo Barrio. El chico tenía en su poder los dos únicos juegos pertenecientes al vehículo y eso hizo sospechar a los investigadores sobre su participación en el crimen. En aquellas fechas Rodrigo estudiaba en un internado y la noche antes de morir, su padre lo había dejado en una estación de autobuses. Tras el arresto de Rodrigo, y pese a que no se hallaron pruebas para llevarlo ante un juez, los hermanos de su madre, residentes en Queirugás, Verín, se personaron en su contra porque lo creían culpable. Rodrigo los denunció al juzgado y actualmente reside en Santiago, lejos de estos allegados. 

Fuentes de la comisaría ourensana han confirmado que esta nueva diligencia pretende reavivar el caso, semanas después de que se cumpliera el aniversario. «Cada 7 de junio se vuelve a preguntar quién fue el responsable de estos hechos», ha explicado un mando policial.