Jácome sobre la Universidad Popular de Ourense: «Ya que existe, no la vamos a suprimir»

Marta Vázquez Fernández
M. Vázquez OURENSE

OURENSE CIUDAD

Un grupo de ciudadanos esperó a Jácome a las puertas del Auditorio con pancartas en favor de la Universidad Popular de Ourense
Un grupo de ciudadanos esperó a Jácome a las puertas del Auditorio con pancartas en favor de la Universidad Popular de Ourense Agostiño Iglesias

El alcalde dice que los «cursillos» volverán a impartirse desde enero del 2022, pero anuncia un cambio de nombre y del modelo de gestión

02 jul 2021 . Actualizado a las 15:56 h.

El alcalde de la capital ourensana, Gonzalo Pérez Jácome, ha dejado claro en un pleno extraordinario celebrado este viernes que la Universidad Popular de Ourese, UPO no es una institución que le parezca prioritaria y que, si de él dependiera, nunca la hubiera puesto en marcha. Pese a todo, ha garantizado que no echará el cerrojo al centro de formación para mayores que tiene una media de 2.600 matrículas por curso, tras semanas se controversia política y contestación social. «Ya que existe, no la vamos a suprimir», ha anunciado el regidor, que garantiza que en enero del 2022 se retomarán los cursos de formación. «No se ha cancelado nada», ha insistido. Eso sí, el regidor ya ha avanzado que las cosas no serán como hasta ahora, ya que la entidad tendrá otra denominación y habrá cambios en la gestión. «Vamos a cambiarla de nombre y a desligarla de una asociación», explicó, tras haber también dejado caer que «hay que delegar en las academias y fomentar la cooperación con ellas para estos cursillos».

Habrá que ver, por tanto, como se articula el futuro de una entidad cuya defensa había motivado un pleno extraordinario convocado por la oposición. Todos los partidos políticos, a excepción de Democracia Ourensana, han votado a favor del mantenimiento de la entidad y del compromiso institucional para que se mantenga en la federación española de universidades populares de España. PSOE, PP, BNG, Ciudadanos y los no adscritos han pedido al alcalde que saque a concurso las acciones formativas, aclarando así el camino a seguir. Todo ello tras un pleno de apenas una hora en la que todos los líderes han echado en cara al alcalde su escaso apego o interés por la cultura. «Isto non debería sorprendernos» ha dicho Pepe Araújo, edil del partido naranja, que incluso reprodujo un pequeño audio en el que se escuchaba decir a Jácome, por entonces aún en la oposición, decir que «la concejalía de cultura no es prioritaria».

La edila del BNG, Ruth Reza, calificó a la UPO como un «tesouro» y recordó que otras entidades para las que sí hay apoyo municipal, como el centro asociado de la UNED, también ofertan cursos de formación para mayores. Esta comparación, molestó al alcalde. «No es lo mismo la carrera de Derecho que un cursillo de encaje de bolillos», protestó el regidor. 

«No se debe cambiar lo que funciona y nadie pidió modificar», dijo Flora Moura, edila del PP, que abogó por «preservar el patrimonio» y recordó al alcalde que «si toda la ciudadanía se lo pide, lo más probable es que sea usted quien está confundido, en referencia a la manifestación en favor de la UPO desarrollada esta misma semana en la capital. Sobre esto también replicó el regidor, que se fijó en las cifras de audiencia del pleno, al que seguían 50 personas. «Ni siquiera los que estuvieron en la manifestación lo están viendo», afirmó. 

Miguel Caride, de los no adscritos, puso en valor «o papel da formación» y aseguró que «os mellores alcaldes non son os que fan máis obras, senón os que teñen máis humanidade». Rafael Villarino, por el PSOE, tildó de «aldraxe»  cualquier intento por cerrar la Universidad Popular y le lanzó una advertencia al alcalde. «Vostede quere acabar con todo». La réplica no tardó en llegar: «A ver si me da tiempo», contestó Jácome.