El multamóvil de Ourense no funciona, pero sigue usándose como «elemento disuasorio»
OURENSE CIUDAD
El vehículo circula pero ya no detecta las infracciones automáticamente
23 jun 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Pese a que no funciona, el multamóvil sigue recorriendo las calles. El Concello de Ourense compró en el año 2007 un AVI (Automóvil de Vigilancia Integral). Por diversas circunstancias, el coche pasó largas temporadas fuera de servicio. En enero del año pasado el gobierno municipal lo recuperó, pero ahora lleva semanas inoperativo. A pesar de ello, la Policía Local sigue utilizándolo como «elemento disuasorio», explica el ejecutivo. Al verlo, los conductores evitan aparcar mal o superar los límites de velocidad, por ejemplo.
Según informan desde el Concello de Ourense, el multamóvil no se encuentra operativo estas semanas como consecuencia de fallos técnicos del sistema, pero sigue en uso porque realiza tareas de vehículo policial y, al mismo tiempo, funciona como «elemento disuasorio» mientras no se actualiza el equipo. El vehículo no puede, por lo tanto, detectar infracciones de forma automática para después tramitar las correspondientes sanciones, de modo que son los agentes los que deben realizar todo ese trabajo de forma tradicional.
En condiciones normales, el AVI (Automóvil de Vigilancia Integral) estaría preparado para localizar estacionamientos irregulares, pero también para monitorizar el flujo de tráfico -una herramienta útil para planificar peatonalizaciones, por ejemplo- o incluso para detectar vehículos robados gracias a su lector de matrículas. Durante el tiempo en que estuvo en servicio, todos esas funciones fueron de utilidad para la Policía Local, pero ahora no están operativas.
No es la primera vez que el multamóvil tiene problemas. Tras su adquisición en el 2007 estuvo durante años sin uso y fue recuperado en el 2016. Sin embargo, en abril del año 2019 volvió a perder su funcionalidad porque el agente que lo manejaba se jubiló. Fue necesario formar a otra persona para realizar ese trabajo y, superado ese proceso, en enero del año 2020 el gobierno municipal anunció la puesta en servicio del AVI de nuevo. Ahora los problemas son técnicos.
Siete denuncias diarias
El concejal responsable del área de Tráfico, Telmo Ucha, explica que una avería en el motor ya ha sido reparada y que ha pedido presupuesto para resolver los problemas en el sistema que sirve para la detección automática de las infracciones a través de la cámara que lleva equipada en su techo. «La operatividad es la misma», asegura, no obstante, el edil, que explica que el multamóvil sirve como elemento disuasorio cuando los conductores detectan su presencia.
El único problema es, según afirma Ucha, la agilidad en el servicio. Antes, en caso de infracción, todo se hacía automáticamente y ahora los agentes que usan el AVI deben bajarse del vehículo para realizar los trámites correspondientes. «De la otra manera era más rápido», reconoce el concejal, que confía en recuperar la plena funcionalidad del multamóvil ourensano en próximas fechas. Si así fuese quizás el vehículo podría reeditar los datos de efectividad que mostraba cuando su rendimiento era completo y tramitaba siete denuncias diarias de media.