La banda había protagonizado en los años 80 una oleada de robos y atracos en viviendas del rural
27 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.En la Audiencia de Ourense comenzaba el juicio por uno de los episodios más singulares de las últimas décadas del pasado siglo: los asaltos a viviendas y los robos en diferentes puntos del rural ourensano de los conocidos como «los encapuchados». Delfín Vázquez Montoya y María Adelia Fiúza compartían desde ese día banquillo de los acusados con otras catorce personas, por su presunta relación con la «banda de los encapuchados», que en los ochenta había protagonizado un buen número de asaltos en vivienda del medio rural. El fiscal imputaba a los acusados, con distintos grados de responsabilidad, los delitos de asociación para el robo, tenencia de armas, explosivos y útiles para el robo, junto con el de receptación. Las penas más altas, doce años, se pedían para Delfín Vázquez Montoya -como cerebro de la trama- y su excompañera María Adelia Fiúza. Para Albino Rodríguez pide la fiscalía seis y, finalmente, para Miguel Gabarri Jiménez y Alfonso Iglesias López, cuatro años, dos meses y un día de prisión menor.