El plantel de Fernando Currás suspendió su partido ante el Pontevedra
04 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.«No nos queda otra que adaptarnos a lo que vaya sucediendo. Nos pasó a nosotros por un positivo, mañana le puede pasar al Céltiga o al Alondras y en tres días al Celta», así explica sus sensaciones Rubén Domínguez, entrenador del Ourense CF, que hoy debía completar la cuarentena impuesta por un positivo en su plantilla. Al mismo tiempo, la vecina UD Ourense no pudo celebrar ayer su segundo amistoso de la pretemporada, ante el Pontevedra CF.
Fernando Currás, técnico rojillo, explicaba: «Nos enteramos de que el hermano de uno de nuestros jugadores había dado positivo en un test. Avisamos de inmediato al Pontevedra de que suspendíamos el partido por una cuestión de responsabilidad y esperaremos al resultado de la prueba del futbolista, antes de volver a los entrenamientos».
La situación en la ciudad varió con las nuevas restricciones y, aunque los preparadores de ambos equipos confían en reanudar el trabajo en la sesión de mañana, la duda siempre sobrevuela. Currás Gallego, incide en que «de momento el virus no afectó a nadie de la plantilla ni del cuerpo técnico, pero tenemos que ir con cuidado siempre. No es la preparación que habíamos planificado, pero otros estarán incluso peor». Domínguez, por su parte, recuerda que han optado incluso por mantenerse a salvo un día más y, aunque no tienen aún el visto bueno sanitario, esperan entrenarse mañana en Oira.