Las protestas se habían generalizado para reclamar una sede propia para el centro de estudios musicales
21 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.La primavera de 1995 estaba «caliente» en la ciudad. Las protestas, manifestaciones, encierros y conciertos reivindicativos ponían de manifiesto una problemática que se había ido enquistando en el tiempo y a la que nadie le daba solución. Ourense no contaba con un edificio propio para el Conservatorio y la ubicación del mismo -en uno de los pabellones del antiguo Hospital, actual Campus- era «lamentable». Los instrumentos se escuchaban por todo el edificio, quedaban fuera de la docencia decenas de alumnos por falta de plazas y la situación era manifiestamente mejorable. Dirigía el centro Carlos Núñez y los ourensanos cerraron filas con el Conservatorio al ver que era una necesidad y una demanda justa.
Tal día como hoy, 25 años atrás, se anunciaba que el Consello da Xunta había acordado crear un edificio propio para el Conservatorio de Ourense. La inversión sería de 458,1 millones de pesetas y la contratación de las obras se realizaría entre los años 1995-1996. La decisión del Ejecutivo gallego desconcertaba en la ciudad, al no haber recibido comunicación alguna ni la dirección del centro ni el comité de seguimiento. Es más, se mantenía la convocatoria de manifestación prevista para los próximos días -se iba a realizar el 25 de abril- hasta que no hubiese una comunicación oficial o confirmación de tal acuerdo.
Las reivindicaciones seguían: los alumnos ofrecían conciertos reivindicativos en la calle y la Federación de Asociaciones de Ourense apoyaba la demanda.