Los aficionados del circuito Madison encumbraron a Nuria Bouza y Erika Kliokmanaite
08 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Ante la imposibilidad de poner en marcha el Madison Beach Voley Tour, los organizadores del circuito nacional de volei playa optaron por mantener atentos a sus seguidores con una competición telemática que bautizaron como #CopaStoriesMBVT, en la que fueron los propios aficionados los que determinaban a los ganadores de los enfrentamientos directos entre las ocho mejores parejas del país, en versión masculina y femenina. En este último cuadro, el triunfo fue para la dupla del Sousas Milenio Ourense, formada por Nuria Bouza y Erika Kliokmanaite.
«Ser las primeras de España en popularidad es gracioso y te gusta también, al fin y al cabo querrá decir que la gente disfrutó con nuestro juego a lo largo de la temporada», aclara Nuria, quien pasa la cuarentena con su familia en Lugo, aunque ya había comenzado la temporada de volei playa con el calendario invernal y preparando otra ilusionante ronda veraniega: «Estaba en Murcia, ya estábamos compitiendo a puerta cerrada, pero comenzaron los rumores de que se iba a decretar el estado de alarma y, al menos, pude llegar a casa, el confinamiento se lleva mejor con la familia».
En medio de esa obligada reclusión doméstica en la que todo el país intenta frenar al coronavirus, la jugadora lucense alababa los esfuerzos de los organizadores del circuito de volei playa por mantener el ambiente, a la espera de que se reanuden las competiciones en vivo: «Como en otros sectores y otros deportes, no sabemos nada de lo que sucederá. De momento ya se suspendió el torneo de Menorca y todo indica que habrá que modificar el calendario, si al final se puede volver a jugar».
La temporada de estío estaba, además, en lo alto de los objetivos a corto plazo de la deportista del Milenio Ourense: «En invierno ya había cambiado de compañera y seguiré con Nazaret Florián. Siempre cuesta un poco compaginarse a este nivel, pero sabía que nos iría bien. La conozco desde hace mucho tiempo, ya que coincidimos en la selección en categorías inferiores, creo que fue un europeo y un mundial sub 18. Ahora ya estamos en los treinta y nos ilusionaba jugar juntas».
Otro aliciente añadido para Nuria Bouza es que la expansión del circuito profesional llegaba a Galicia con uno de los torneos del Madison en Sanxenxo: «Ojalá se pueda jugar al fin, porque tenía muchas ganas de que por aquí se pudiera disfrutar del mejor volei playa del país». Para eso, seguirá defendiendo los colores del club ourensano, junto a la sevillana con la que ya pasó por Oira para presentar el calendario de invierno. De momento, le toca prepararse en casa para llegar en el mejor momento de forma posible a la reapertura del circuito: «Tengo una elíptica en casa y le estoy dando bastante caña, también aprovecho todo lo que tengo por aquí para entrenarme por las mañanas. Hasta cuento con el apoyo de mi hermana y hago sentadillas con ella subida a mi espalda».
Bouza procede de una familia en la que se respira voleibol y esa pasión la trasladó a Ourense, donde también echó una mano al Abril Ourense en la Primera Nacional, además de dirigir la cantera de la entidad: «El club solicitó un ERTE, pero estoy muy contenta con ellos y espero seguir colaborando con un proyecto que me encanta. Siempre me ha gustado mucho trabajar con las niñas y aquí tenemos un grupo fantástico. Nos decían que se nos quedaba corta la liga y, al final, ha sido demasiado corta en todos los sentidos. Ojalá sigamos creciendo en el futuro».
Antes, su buena temporada con Erika Kliokmanaite tuvo un reflejo aún más exitoso en Instagram, donde superaron en popularidad a Tania Moreno y Daniela Álvarez, que las habían superado en la final de la Copa de la Reina. Cosas del club de fans.