Buenas intenciones

Ruth Nóvoa de Manuel
Ruth Nóvoa DE REOJO

OURENSE CIUDAD

Santi M. Amil

17 nov 2019 . Actualizado a las 20:47 h.

Dicen que el infierno está empedrado de buenas intenciones. La buena voluntad es fantástica pero las historias que empiezan con ella no siempre acaban bien.

En esta línea, lo que parece empedrado de buenas intenciones es el camino a Montealegre. El Concello de Ourense alentó una limpieza del monte tras las magostos en la que iban a participar (lo impidió el mal tiempo) decenas de escolares ourensanos. La intención era concienciar sobre el necesario cuidado al medio ambiente pero, desde mi punto de vista, erraron el tiro.

Es una gran idea inculcar en esos niños que hay que cuidar el planeta, desde lo más próximo, pero con una actividad como esta se traslada un mensaje de fondo que considero negativo en esta sociedad nuestra, cada día más egoísta: unos tiran, ensucian, contaminan y, mientras pasan la resaca, otros recogen su basura. Que alguien me explique si esto es concienciación medioambiental o una tomadura de pelo. Demasiado tiempo lleva la sociedad funcionando así como para alentarlo y perpetuarlo con mensajes de este tipo.

Enseñar a los niños, que son mucho más listos que nosotros, es fundamental. Y hay muchas formas de hacerlo. Lo sabemos bien en esta casa, que impulsa el programa Voz Natura. Pero que sea con charlas, visitas, plantaciones... no limpiando lo que otros han tenido la desfachatez de dejar tirado sin rubor. Veo bien incluso otro tipo de recogidas, en plena cruzada contra los plásticos. Pero esta me parece demasiado obvia, demasiado inmediata: yo el lunes dejo los envases de mi botellón y ya el martes me lo vienen a recoger unos chavales. ¿Qué mensaje le damos a los niños? Y, sobre todo, ¿cuál le damos a los cerdos que ponen triste a Montealegre?

Vería mejor cuadrillas informativas durante el fin de semana o una distribución especial de contenedores en el monte, si no se quiere multar un fin de semana festivo, que también podría ser.

Pero aquí que cada palo aguante su vela: los del monte a no tirar, la empresa de la limpieza que cobra por ello a recoger y los escolares a formarse una conciencia medioambiental y a currar en lo que haga falta... pero no a limpiar la basura de los que no saben comportarse en los magostos.