De las empanadillas del Río de la Plata al pollo de Le Coq

María Doallo Freire
María Doallo OURENSE

OURENSE CIUDAD

MIGUEL VILLAR

Alfonso García es el propietario del nuevo restaurante de la calle Saénz Díez

14 nov 2019 . Actualizado a las 19:12 h.

Le Coq es un restaurante especializado en pollo a la brasa que acaba de abrir sus puertas en la ciudad, en el mismo lugar donde durante años estuvo el Río de la Plata, que para algunos servía las mejores empanadillas de la ciudad. Chimichurri, cajún, piri-piri o thai son ejemplos de los marinados con los que se preparan los pollos hasta doce horas antes de asarlos. Ese es uno de sus mejores secretos. «Utilizamos carbón vegetal ecológico y eso también se nota mucho», afirma Alfonso García, propietario del local. El restaurante forma parte de una cadena madrileña que, con el impulso de Alfonso, apuesta por Ourense como primera provincia en la que ampliar el negocio. «Creo plenamente en esta ciudad, en su hostelería y en su gusto por lo diferente e innovador. Aquí, gracias a Coren Grill, todos comemos pollo porque es un alimento con una alta calidad», dice.

Le Coq propone un concepto nuevo que liga la carne de este ave de corral con distintas cocinas del mundo: «Occidentalizamos las recetas para que sean atractivas a cualquier paladar pero las bases provienen de la cocina tailandesa, marroquí, argentina...». Las que más salen son la receta Tradición, a base de hierbas provenzales y limón, y la más picante, la Peruana, con ajos molidos, comino, achiote y ají panca. Y además su precio ronda los 10 euros. Alfonso tiene claro que tan importante es cuidar la materia prima, que ayuda a crear platos equilibrados y saludables, como mimar la estancia en el restaurante. «Hemos apostado por la experiencia en sala. Tenemos varios espacios que crean distintos ambientes porque nuestra finalidad es llegar a todo tipo de público y que además se sienta cómo en casa», explica. Así, entre sus mesas se pueden ver celebraciones de cumpleaños de jóvenes; un grupo de amigos disfrutando de cócteles en la terraza exterior; o familias enteras cenando en el salón principal. El empresario no se olvida de su equipo humano: «Alba, María, Diana, Yaiza, Elvia, Jose, Alí y Mylena son Le Coq. Viven el producto como lo hago yo y así se lo transmiten a los clientes». Ahora solo queda pedir mesa y a degustar.