La pelea en solitario del Rosalía

Luis Manuel Rodríguez González
luis m. rodríguez OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

EFFR

El plantel dirigido por Iván Canal está compitiendo bien con su joven plantilla en la Segunda Autonómica

03 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

«Es feliz el que soñando, muere. Desgraciado el que muera sin soñar», plasmó en un papel Rosalía de Castro, a la antigua usanza. La prosa y los versos de la insigne escritora inspiraron a muchas personas a lo largo de distintas épocas y animaron los deseos oníricos de los impulsores de la escuela de fútbol que bautizaron con su nombre. Su equipo sénior y los de formación son los únicos de Ourense que participan en competiciones femeninas, con lo meritorio y lo intrépido que eso acarrea.

Así lo explica Iván Canal, entrenador de la primera plantilla: «No es fácil adaptar un grupo en el que dos o tres jugadoras con cierta experiencia se mezclan con niñas de 12, 14 ó 16 años, que a veces vienen de jugar en equipos masculinos o en el fútbol sala, pero lo hablamos con la directiva y queremos que sea un proceso natural, sin forzarlas, para conseguir un bloque con chicas que elijan el fútbol como hábito de vida saludable».

El técnico está satisfecho con un reto muy distinto a los que afrontó en la última década, en la cual siempre estuvo vinculado al deporte en general y, sobre todo, al balompié: «Estoy contentísimo, ellas tienen muchas más ganas que los chicos y se lo toman más en serio». Y, gracias a esa voluntad de progresión de sus jugadoras, Canal también supera escollos como los de la planificación de una pretemporada muy complicada: «Al final, como entrenamos todos los días, le sacamos más partido que con la liga en marcha, porque ahora solo lo hacemos dos veces por semana, pero llamé a varios equipos de Pontevedra y no hubo manera. Solo disputamos un amistoso allí y otro en Chantada, además de otros dos partidos contra plantillas masculinas».

Con todo, Iván da por bueno el nivel de competitividad que alcanzó el Rosalía, coincidiendo en el análisis con su capitana y extensión en el campo, Alba Rodríguez: «Todo está saliendo bien, pese a que no es nada fácil esta liga, solo perdimos ante un Chispa que va a estar arriba, empatamos otro partido y ganamos dos remontando. Yo creo que tenemos más calidad y nivel este año, además de que entrenan con nosotras dos o tres infantiles y eso es bueno para el futuro».

Y lo dice la entrenadora de ese equipo de formación, además de directiva y mujer orquesta del equipo rector que preside Mario Gómez. Y en esa estructura en la que todos arriman el hombro, la propia Alba recuerda que el segundo puesto de las infantiles en la Liga Promesas fue un logro a tener muy en cuenta, aunque los desafíos parten de nuevo de cero: «Este año jugaremos en un torneo distinto, en el que no sabemos nada de los rivales. Solo jugamos un amistoso contra el primer equipo y ni siquiera pudimos medirnos con infantiles masculinos, porque sus ligas comenzaron antes de la nuestra».

Los técnicos del Rosalía también apostaron por jugadoras de esa cadena de cantera, para integrarse ya, sin más dilación, en la primera plantilla, como es el caso de la recién incorporada Noa Fernández, que llega desde la UD Ourense: «Será referencia del fútbol femenino ourensano», asume la capitana de las sénior, mientras la niña de 15 años se muestra al natural: «Estoy muy cómoda aquí, en una liga sénior, aunque hay mucha diferencia en el físico y en la técnica».

Tampoco duda a la hora de señalar que juega como delantera o en banda, pero parece que lo suyo es el fútbol de ataque: «Marqué tres goles en un amistoso y otro en la liga, en la última jornada, creo que está bien, pero igualmente espero seguir mejorando y ayudando al equipo».

Y es que el gol llama la atención también en el fútbol femenino y, sin embargo, abriendo el horizonte en el resto del campo, también encontramos historias como las de Begoña Domínguez, ya implicada en el proyecto en la época de la unión con el Bosco en el 2017: «Jugué al fútbol sala en el Paco Paz, pero después ya me vine para el fútbol. Solo tengo trece años y a veces es difícil marcar a algunas chicas, pero me divierto en el campo. Iván me alinea como lateral derecho y a veces un poco más adelante». Y solo está creciendo, como toda la Escuela Rosalía.