Replicantes

Ruth Nóvoa de Manuel
Ruth Nóvoa DE REOJO

OURENSE CIUDAD

27 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Desde que Jácome es alcalde y su promesa de crear un centro de inteligencia artificial se ha transformado en un proyecto municipal no dejo de pensar en dos cosas al respecto: ni creo en ese proyecto ni me lo creo. Pero claro, queda feo decirlo en voz alta. Quizás por eso representantes de varias instituciones (Diputación, Universidad de Vigo, UNED...) se han abrazado a una idea que no parece más que eso, una idea, y que no se sostiene sobre ningún proyecto ni parece tener más objetivo que meter a científicos -ojo, a mil- en un edificio.

Pero como decía, quizás por eso de los cien días de cortesía o tal vez porque Ourense está tan falto de iniciativas que parece ingrato criticar las que surgen, no me animaba a decir que el plan tiene los pies de barro y más pronto que tarde -ojalá me equivoque- pasará a ser un apunte más en la lista de promesas pendientes.

Pero cuando esta semana moría Rutger Hauer, el replicante de Blade Runner, y recordaba que la acción de esta distopía transcurría en el 2019 me di cuenta de que ya no podía resistirme. Fue como una señal. La cinta de Ridley Scott -que se estrenó en 1982 y que yo vi años más tarde animada por el entusiasmo de mi hermano mayor pero motivada solo por Harrison Ford- es un referente de la ciencia ficción. Y eso es lo que parece, por el momento, el centro de inteligencia artificial que Jácome quiere poner en marcha. No se sabe quién va a hacer qué, por qué, cómo, con qué medios y con qué fin. Suena a «Póngame cuarto y mitad de científicos, que ya veré luego como los preparo». En Ourense no necesitamos películas pero lo que sí se ve que tenemos es muchos replicantes.