Última oportunidad para participar en el programa de acogida de niños saharauis
OURENSE CIUDAD
El Concello de Ourense cierra este miércoles el plazo de inscripción para las familias interesadas
17 abr 2019 . Actualizado a las 08:14 h.El Concello de Ourense cierra este 17 de abril el plazo para las familias que quieran participar en el proyecto solidario «Vacaciones en paz», una iniciativa creada en 1996 por la asociación Solidariedade Galega co Pobo Saharaui y con la que colabora la entidad municipal. El objetivo de este programa es evitar que los más pequeños (está enfocado a niños entre 8 y 12 años) pasen los rigores del verano en los campamentos de refugiados del desierto, donde se llegan a alcanzar los 50 grados a la sombra. Las familias acogedoras les ofrecen esa opción durante dos meses, los de julio y agosto. El programa incorpora además, gracias a un convenio con el Sergas, revisiones médicas para comprobar su situación física.
El Concello de Ourense recibe las peticiones de las familias empadronadas en Ourense y dispuestas a participar. La asociación saharaui se encarga de ofrecerles una charla formativa, en la que se les habla de cuestiones que pueden serles prácticas para mejorar la experiencia relacionadas con e idioma, sus costumbres y tradiciones. Durante la acogida se organizan actividades de ocio y se ofrece apoyo a as familias con un monitor saharaui.
Incorporaciones a Ledicia Cativa
Por su parte, la asociación Ledicia Cativa, la oenegé que gestiona la acogida de menores procedentes de la región rusa de Briansk, la mas afectada por la radiación de Chernóbyl, ya ha cerrado las listas de acogida para el presente verano. La entidad traerá este verano a 55 niños, que proceden de familias en situación social y económica difícil, que se repartirán por las cuatro provincias gallegas. Aunque este año se han incorporado dos nuevas familias ourensanas al proyecto, la provincia que vio nacer este proyecto sigue siendo la que menos acogimientos realizará. La iniciativa surgió hace ya 24 años. Un grupo de familias decidió dar un paso al frente para intentar alejar del ambiente contaminado al menos durante un par de meses al año a niños rusos que vivían en orfanatos de las zonas afectadas por el accidente en la central nuclear de Chernóbil, aunque con el paso de los años se incorporaron también menores de familias con pocos recursos. Cerca de un millar de pequeños se han podido beneficiar de esta iniciativa, que prolonga la estancia de cada participante durante varios veranos cosecutivos.