«El médico de familia no puede ser un "prêt à porter", tiene que ser un traje a medida»

Elisa Álvarez González
Elisa Álvarez SANTIAGO

OURENSE CIUDAD

Miguel Villar

El colegio médico de Ourense acogió una conferencia de Jordi Varela,  ditor del reconocido blog «Avances en gestión clínica»

27 mar 2019 . Actualizado a las 11:28 h.

Jordi Varela, médico de familia, ha sido gerente de varios hospitales y es editor del reconocido blog «Avances en gestión clínica». El colegio médico de Ourense acogió una conferencia de este especialista, en la que profundizó sobre el valor de la práctica clínica.

-¿Hay prácticas clínicas de mayor o menor valor?

-Expliquemos antes el concepto. En el sistema sanitario estamos muy empecinados en la actividad, las listas de espera o el rendimiento de quirófano, pero en los últimos diez años ha nacido un movimiento a nivel mundial que, sin denostar esto que es importante, aparece el concepto de valor aplicado a la sanidad. Y el valor de la práctica clínica es la percepción que las personas tenemos de la efectividad clínica. Un médico puede medir la efectividad por expectativa de vida en un cáncer, por ejemplo, pero las personas sin diferentes, uno da más valor a vivir más y otro a que el tiempo sea de calidad. Estábamos convencidos de que salvar vidas era lo más valioso que podíamos hacer, y siendo verdad, cuando preguntamos resulta que esto para las personas tiene matices, algo a lo que no estábamos acostumbrados.

-¿Qué ejemplo puede ponerse sobre esas prácticas de mayor o menor valor?

-En los pacientes crónicos, frágiles y vulnerables la medicina se mueve con dificultad. Tenemos una medicina muy eficaz y muy intervencionista, y este es un mundo de cuidar. Hospitalizaciones innecesarias o evitables en estas personas son un mundo de no valor. Los pacientes frágiles y crónicos, cuanto más lejos del hospital mejor. Un día tienen que ingresar, por ejemplo si se rompen un fémur, pero todo lo que podamos evitar, mejor, y en cambio estamos ingresando a estas personas de manera exagerada. Este es un modelo poco valioso, por lo que la hospitalización, para estas personas, es una práctica de poco valor.

-Con tanto hospitalcentrismo, ¿se ha descuidado la primaria y por lo tanto creado un sistema un poco ineficiente?

-Sí, hemos descuidado la primaria y los servicios comunitarios en bien de la tecnología, y hay que equilibrarlo. La medicina hospitalaria, tecnificada, es muy importante, pero cuando hablamos de cifras nos damos cuenta de que toda esa tecnología es muy importante más o menos para un tercio de los pacientes. Potenciar hospitales, diagnóstico por imagen, la última quimioterapia, ¿es una política buena o mala? Diría que es buena en un tercio. A mí, si me tuviesen que operar de cataratas me gustaría que me operara un equipo con la mejor tecnología y que interviniese mil cataratas al año, porque la cantidad es calidad. Pero esa política, cuando llega el paciente crónico y vulnerable, no sirve para nada, porque lo importante es su plan individualizado, la enfermería y la atención integral. Los hospitales del futuro tienen que estar muy tecnificados para ese tercio de pacientes, pero para la otra parte se tiene que desinchar, cuanto menos mejor.

«Los pacientes frágiles y crónicos, cuanto más lejos del hospital, mejor»

-Recomienda hacer triajes en primaria, ¿serían efectivos?

-Los recursos no acaban de adaptarse a la demanda. En atención primaria Galicia pasa un momento muy delicado pero Cataluña acaba de tener una huelga y en toda España la situación es tensa. Esto se debe a que vivimos una situación que no responde a la realidad. Las personas tenemos derecho a la protección de la salud, lo dice la Constitución, pero lo que no dice es que tengamos derecho automáticamente a un médico de familia. A lo mejor nuestro problema lo resuelve mejor un trabajador social, un enfermero o un odontólogo, por eso es imprescincible el triaje. En urgencias empezamos con el triaje digamos hace unos diez años y antes era impensable, la gente iba y punto, y ahora ya sabe que primero tiene que expresar su problema y a partir de ahí habrá un triaje.No podemos mantener la situación actual de la primaria.

-¿Qué le pasa a este nivel asistencial?

-Es evidente que hace falta inversión, pero además hace falta autonomía de gestión y que los centros tengan su modelo organizativo, con triaje. Lo que no puede ser es que los médicos de familia sean un prêt à porter, cada consulta siete minutos, ahora una baja y a continuación una persona con complejidad que requeriría media hora.

-Si la consulta del médico de familia no puede ser "prêt à porter", ¿debe ser alta costura?

-Bueno, traje a medida, sí, alta costura, si nos comparamos con los ingleses el médico es un profesional muy protegido por su equipo. El paciente va, pide hora, y el equipo le pregunta qué le pasa, por lo que la persona que ve el médico es una persona a la que realmente el médico le va a aportar algo. Hay una gran parte de la demanda para la que la enfermería tiene muchas competencias, ya que no es un auxiliar del médico. Personas con riesgo cardiovascular, de seguimiento, con cronicidad, la enfermería forma e informa mucho mejor a las personas, por lo que tendría que tener una agenda propia. Hay que pasar del trabajo individual al trabajo en equipo, y de agendas discriminadas a agendas con criterio.

-¿Qué prácticas clínicas tienen un valor indudable?

-Normalmente las que tienen que ver con situaciones muy agudas de gente relativamente joven, el infarto de miocardio, el código ictus, trasplantes, hemodinámica moderna, intervenciones quirúrgicas programadas,todo eso funciona muy bien y tenemos grandes hospitales. Si tengo un dolor torácico y llamo a una ambulancia me salva la vida, en ese caso el hospital es dios. Pero debemos empezar a deshinchar de los hospitales la parte en la que no son buenos _personas frágiles y crónicas_ para que se concentren en lo que son buenos.

-¿La sociedad está sobremedicalizada?

-Sin lugar a dudas, hemos convertido la medicina en un bien de consumo. Hemos confundido a la población con que cuanto antes mejor y cuanto más mejor, y esto no siempre funciona bien, hay que intentar hacer planes de atención adecuados a cada persona.