
Los arquitectos potenciarán su colocación tanto en obra pública como privada
20 feb 2019 . Actualizado a las 08:21 h.La calidad de vida de las personas ostomizadas, es decir, las que se han sometido a una intervención quirúrgica que les obliga a llevar una bolsa para la evacuación del contenido intestinal o de la vejiga, va a cambiar de forma importante gracias a un invento ourensano: un baño especialmente pensado para ellos.
La idea, que partió de la Asociación ourensana de Enfermos de Crohn y Colitis Ulcerosa (ACCU) y encontró un colaborador entusiasta en Carlos Rodríguez, gerente de la empresa Aceros Argimiro. «Yo desconocía completamente esta realidad, pero el presidente de la asociación, Fernando Jiménez Zulliani, habló un día conmigo y me contó la problemática. Ya en ese mismo momento cogí un lápiz y, con lo que me iba contando, hicimos un primer boceto», explica. El ingeniero Walter Saín se sumó a la iniciativa «por echar una mano; lo vi tan implicado en esta cuestión social que pensé que tenía que ayudarlo», cuenta. Han pasado seis meses y la idea, ya patentada, es una realidad. Aceros Argimiro fabrica el primer ejemplar de un modelo -ya lo han patentado- de servicio higiénico para personas ostomizadas.
Esa primera unidad se colocará en una instalación pública del Concello de Ourense, que ya se ha sumado al proyecto de la asociación ACCU, pero teniendo en cuenta que no existe nada parecido en el mercado la idea puede convertir a Ourense no solo en un referente de accesibilidad sino también en punta de lanza para un nuevo mercado. «Solo en Ourense hay 800 personas ostomizadas, en España, 90.000; y es una cifra en constante crecimiento», señala el presidente de ACCU.
«Podremos fabricar los que se necesiten; calculamos que el tiempo para producir cada unidad es de entre tres y cuatro horas», matiza Carlos Rodríguez.
De momento, la asociación ourensana espera que más instituciones públicas con las que se han puesto en contacto, como la Diputación o Expourense, se animen a colocar estos baños en sus instalaciones. También han hablado con la Xunta que, aunque en su día fue la autonomía pionera en España en adaptar baños en los principales hospitales de provinciales, podría ahora adquirir estos servicios «muy compactos, ligeros y de coste muy asequible, para otras instalaciones», dice Zulliani.
Pero además la asociación acaba de fichar a otra pieza clave para difundir esta necesidad social: los arquitectos. Alberto de Paula, presidente del colegio profesional, certificaba este martes el compromiso de su colectivo para hacer ver esta realidad y facilitar la instalación de estos baños tanto en la obra pública como en la privada. «No podemos permitir como sociedad que haya personas que no puedan usar un aseo en condiciones dignas», señaló recordando que a la ley de accesibilidad que estos profesionales cumplen en sus proyectos es tan genérica «que hay limitaciones como esta en las que no pensamos por puro desconocimiento».
Una pieza compacta con taza, lámina de espejo, repisa y ducha
Una de las razones que movió a la asociación a impulsar este diseño de baño «fue que cualquier persona se lo pueda colocar también en casa; por eso se pensó en un modelo compacto y muy ligero», matiza Zulliani. Además no necesita ningún tipo de obra de instalación, lo que abarata notablemente el coste. Mide 83,5 centímetros y se puede colocar en cualquier espacio, no necesariamente al lado de un váter, ya que tiene un pequeño motor que, por una salida de 40 milímetros, puede llevar el agua hasta seis u ocho metros en horizontal y cuatro en vertical. El inodoro está suspendido a 75 centímetros del suelo para evitar que haya que agacharse -lleva integrada una banqueta para los niños- y la tapa es en acero inoxidable que hace de espejo. Lleva un estrecho grifo de ducha con gatillo para la limpieza de la bolsa, además de una repisa integrada.