Es el segundo grupo más numeroso tras los absolutos
14 nov 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Más de 2.700 corredores de entre 11 y 17 años están inscritos para participar en la carrera del San Martiño de este domingo. Son exactamente 2.719 los nacidos entre los años 2007 y 2002 que completaron su anotación para correr los 4.700 metros de su prueba. Es la segunda inscripción más numerosa, después de la de la prueba absoluta, que suma 4.279 inscritos.
En total, la lista de todas las categorías supera los once mil participantes anotados. «Es un buen dato, era lo estimado. La absoluta cumple el objetivo y es muy positivo el número de la carrera escolar porque abarca unas edades que es cuando más interesa que se aficionen al ejercicio y a tener hábitos deportivos», comentaba ayer el gerente del Consello Municipal de Deportes (CMD).
El personal del CMD ourensano ya tiene experiencia después de 41 ediciones de la carrera popular, pero la cita sigue poniendo a prueba la logística municipal y exigiendo un sobreesfuerzo al personal. El Consello Municipal de Deportes tendrá a treinta trabajadores de su personal propio trabajando el domingo, a los que hay que sumar 55 agentes de la Policía Local de Ourense, otro medio centenar de voluntarios, 52, de Protección Civil y unos cuarenta efectivos de la Policía Nacional, que también colaborarán para que todo salga bien en esta edición. A mayores hay voluntarios que ayudan en tareas como la entrega de dorsales-chips y de camisetas, que se hará el viernes por la tarde y el sábado en Expourense, donde se celebra el segundo salón del deporte y turismo activo, Sportur.
La organización incluye novedades en la organización de este año. La entrega anticipada de camisetas y la disposición de un punto de avituallamiento en Pardo de Cela se han planteado este año para agilizar la llegada de los corredores. Otra de las innovaciones es la participación de personas con diversidad funcional. Son 1.664 los inscritos, aunque el dato engloba a los más pequeños, corredores nacidos del 2012 en adelante, y a los participantes con diversidad funcional.
Si la llegada se intenta que sea más fluida, la emoción hace que la salida sea un momento de cierta impaciencia, sobre todo para aquellos que quieren salir corriendo ya muy rápido. La San Martiño ya forma parte del calendario de los aficionados ourensanos. Desde septiembre, se ven grupos preparándose para la carrera, indica González.