Valoriza afirma que la ayuda en el hogar está en riesgo por retrasos en los pagos

Rubén Nóvoa Pérez
rubén nóvoa OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

miguel villar

El PSOE deja en el aire el apoyo a las modificaciones de crédito por el «agujero negro»

25 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El servicio de ayuda a domicilio en el Concello de Ourense vuelve a ser noticia por cuestiones ajenas a la atención a las personas mayores. La relación entre el gobierno local y la concesionaria no pasa por su mejor momento, hasta el punto que la continuidad del programa está en el aire a partir de enero del año próximo.

El origen del conflicto se encuentra en el retraso con que la concesionaria Valoriza está recibiendo el pago de las facturas mensuales. Según un escrito remitido por la directora de Sacyr Social, que es la propietaria de la firma, al alcalde de Ourense el pasado 14 de septiembre la falta de pago ha generado un «quebranto económico que amenaza con hacernos imposible el seguir soportando los costes del servicio». Es por ello que en la misiva, que ayer fue difundida por los grupos políticos de Democracia Ourensana y PSOE, se insta al alcalde de Ourense a que proceda a la regularización «inmediata» del estado de la deuda para evitar posibles acciones judiciales. Esa demora, según figura en la documentación aportada por Valoriza, era a fecha de 14 de septiembre del 2018, de 1,8 millones de euros. Se adeudaban facturas del año 2017 -desde el mes de mayo- y dos del 2018 correspondientes al mes de mayo. En total, la deuda ascendía a 1,8 millones de euros. «Esto significa, por tanto, que hay una demora en el pago de mucho más de seis meses, estando por tanto este Concello incurso en causa de suspensión o resolución del contrato», apuntan desde Sacyr.

El alcalde de Ourense aseguró, sin embargo, que esa deuda se había rebajado considerablemente y que ya solo se adeudaban cuatro de las ocho facturas que estaban pendientes del año 2017 y dos del 2018, que atribuyó a controversias sobre la interpretación del pliego de condiciones y que, por tanto, estaban en manos de los servicios jurídicos. De acuerdo con lo argumentado por Jesús Vázquez esa deuda se habría rebajado hasta situarse por debajo del millón de euros.

Más allá de la deuda actual, sobre el servicio de ayuda a domicilio en el Concello de Ourense se ciernen oscuros nubarrones, toda vez que la concesionaria ha trasladado al gobierno local su decisión de no ejecutar la prórroga del contrato, que caduca el próximo 3 de enero. «Es urgente, por tanto, que este Concello arbitre los mecanismos necesarios para que en esa fecha se produzca el traspaso fluido del contrato», explica la directora de Gestión Contractual de Sacyr en la carta remitida al alcalde de Ourense.

Los retrasos en el pago de las facturas a la concesionaria de la ayuda a domicilio ha supuesto un nuevo encontronazo político entre gobierno y oposición. El PSOE había mostrado su disposición a apoyar una serie de modificaciones de crédito para hacer frente al pago de obras y una serie de convenios sociales, entre los que se incluiría una partida para Valoriza. «Sin transparencia es imposible que el PSOE apoye las modificaciones de crédito. Estamos ante un agujero negro de la concejalía de Sofía Godoy», explicó Vázquez Barquero en una rueda de prensa. Echó en cara al PP que ocultaran información de manera «sistemática» y alertó de que la situación en la que está la ciudad es «extrema». El regidor, por su parte, acusó al PSOE de «xogo sucio» y aseguró que eran conocedores de la situación y los motivos de la deuda que, dijo, es mucho menor de los 1,8 millones de euros. «Hai un bloqueo sistemático e deslealdade por parte da oposición».

Democracia Ourensana emitió un comunicado en el que calificaba de «intolerable» que un Concello con 70 millones de superávit adeude facturas del 2017 a una empresa de servicios sociales.