La analista política presenta en El Cercano su novela «Baghdad. A un paso del infierno»
11 sep 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Analista internacional y experta en Oriente Medio, la viguesa Yashmina Shawki presenta esta tarde en Ourense su novela «Baghdad. A un paso del infierno» (Terra Ignota). La cita será en El Cercano (20.00 horas) y estará acompañada por Ana Malingre.
-Cuando se dio a conocer el trabajo dijo que la obra data del 2008.
-Fue escrita ese año y quedó finalista en el premio Primavera del 2009. La crisis en el sector editorial y el nuevo escenario me hizo plantearme la autoedición, aunque Terra Ignota apostó por ella.
-¿Por qué Irak en 1979?
-Además de ser un año en el que estuve allí, el intervalo 1979-1980 es crucial en la historia del país. Coincide con la llegada a la presidencia de Saddam Hussein y en ese momento Irak cambió para siempre con las purgas, la revolución, la invasión del país y todo lo que vino después.
-¿Cómo era el país entonces?
-La sociedad de Irak era culta, abierta, plural, con un nivel académico y unos avances que nada tenían que ver con los países del entorno del Oriente Próximo. Irak era un país muy avanzado en 1979.
-¿Esa es la realidad que se refleja en su obra?
-Es una novela coral en la que se entremezclan varias historias, algunas reales que proceden de las narradas por mi padre -o de experiencias familiares- y otras creadas por mí. El protagonismo recae en la sociedad iraquí, con personajes que van desde cargos públicos o miembros de la policía secreta a personas de lo más humilde, y lo que enlaza todas las historias es La Organización, que es un colectivo de personas que intenta ayudar a otros para salir del país para salvar la vida.
-¿El infierno llegó tras esa etapa de esplendor?
-Irak cayó al infierno y allí sigue desde entonces. Se sufrió la dictadura y el exterminio de Saddam Hussein, luego la invasión, el fanatismo religioso y la grave crisis política que no acaba. El 12 de mayo hubo elecciones y aún no hay acuerdo para formar gobierno. Ciudades como Basora, rica en petróleo, está sitiada por el cólera, sin agua y sin apenas luz.